Abismo (1977)

“Abismo” (Abyssal) es una película que, paradójicamente, termina siendo más inquietante por su quietud y atmósfera tensa que por los elementos que anuncia: un naufragio, morfina y el potencial de un thriller de suspense. La dirección de Peter Caranovich consigue crear un ambiente claustrofóbico y opresivo desde los primeros minutos, utilizando la luz y la sombra de la costa bermudiana y las profundidades marinas para generar una sensación de incomodidad y anticipación. La fotografía, a menudo en tonos azulados y apagados, contribuye significativamente a este efecto, imbuyendo cada escena con una sensación de melancolía y peligro inminente. Es una película que, a pesar de su aparente simplicidad, exige una atención meticulosa por parte del espectador, recompensándolo con una experiencia visualmente cautivadora y emocionalmente resonante.

Las actuaciones son, en general, sólidas, con una destacada interpretación de Brian Cox como el enigmático traficante haitiano. Cox no se limita a interpretar un villano caricaturesco; en lugar de eso, ofrece un retrato de un hombre consumido por sus obsesiones y su pasado, mostrando una vulnerabilidad inquietante bajo la superficie de su despiadada ambición. La química entre Cox y la protagonista, Gail Berke, es notable, construyendo una dinámica de tensión constante que impulsa la narrativa. Caranovich ha logrado evitar los clichés del thriller moderno, centrándose en las relaciones interpersonales y en el impacto emocional del descubrimiento del buque hundido en los personajes. Sin embargo, la película podría haber beneficiado de un desarrollo más profundo de algunos personajes secundarios, especialmente el buscador de tesoros, cuya motivación a veces parece un tanto superficial.

El guion es el elemento más discutible de "Abismo". Si bien la premisa, un descubrimiento accidental que desata una serie de eventos peligrosos, es intrigante, el ritmo es deliberadamente lento, a veces hasta el punto de resultar tedioso. La película se centra en el proceso de exploración y la interacción entre los personajes, relegando el desarrollo de la trama principal a un segundo plano. Si bien esta deliberada lentitud sirve para generar la atmósfera de suspense deseada, también puede frustrar al espectador que espera un desarrollo más activo de la historia. La trama se apoya en elementos del misterio y la paranoia, pero carece de la complejidad y los giros inesperados que podrían haber elevado la película a un nivel superior. El final, aunque satisfactorio en cierto modo, es deliberadamente ambiguo y deja la puerta abierta a interpretaciones múltiples, lo que puede resultar tanto positivo como negativo dependiendo de las expectativas del espectador. En definitiva, la película no ofrece respuestas fáciles y deja al público con más preguntas que soluciones.

A pesar de sus defectos, "Abismo" es una película que merece la pena ver por su atmósfera opresiva, sus actuaciones convincentes y su capacidad para generar una sensación de inquietud duradera. Es una película contemplativa que invita a la reflexión y que deja una marca en la mente del espectador. No es un thriller convencional, sino más bien un estudio psicológico de la obsesión y la ambición, envuelto en un escenario exótico y misterioso.

Nota: 7/10