
Agáva (2016)
(SK) · Drama · 1h 31m

Dónde ver Agáva
Actualmente no se encuentra disponible para ver en plataformas de streaming en España.
Sinopsis
En el corazón de una pequeña localidad fronteriza de Eslovaquia, la llegada inesperada de Hampl, un respetado constructor, y su joven esposa Nada, conmociona a la comunidad. Nada llama la atención de Daniel, un joven y prometedor profesor local aún afectado por sus experiencias en la Segunda Guerra Mundial. Inicialmente, Nada resiste el encanto de Daniel, pero la presencia hipnótica del agave en el calor del verano, después de treinta años de letargo, amenaza con alterar su determinación.
Cuando el agave, finalmente, florece en 1947, la decisión de Nada de permanecer firme se ve irrevocablemente alterada. Esta conmovedora historia de amor superficial se transforma en un profundo estudio psicológico que explora las tensiones políticas y sociales de la posguerra en Eslovaquia. Protagonizada por Katarína Šafaříková, Marek Geišberg y Milan Kňažko, la película, con la interpretación de Éva Bandor, captura el drama de una época de incertidumbre, justo antes del golpe comunista que borraría el legado de una generación de intelectúas. Un relato intenso sobre el amor, la memoria y las consecuencias de la historia.
Ficha técnica
Agáva
SK
Patrik Pašš
Reparto principal de Agáva
Actores y actrices destacados que dan vida a la historia en Agáva.
Críticas de la película
Opiniones reales de usuarios que han visto Agáva. Consulta sus valoraciones y comentarios.
“Agáva” es una película que, más allá de su narrativa aparentemente sencilla, se instala en la memoria con una fuerza sutil pero persistente. La dirección de Juraj Herz es magistral en su uso del paisaje eslovaco, transformando el árido terreno y la luz intensa del verano en un personaje más que silencioso espectador de la lucha interna de sus protagonistas. Herz evita el melodrama gratuito y opta por una presentación gradual, construyendo la tensión dramática con una paciencia admirable, lo que resulta especialmente efectivo en la representación de la atmósfera de posguerra y la incertidumbre que permea la vida de la comunidad.
La película se centra en la llegada de Hampl y Nada a una pequeña localidad fronteriza. El encuentro con Daniel, el profesor, es el detonante de una narrativa que trasciende el romance convencional. Katarína Šafaříková ofrece una interpretación absolutamente convincente de Nada, su personaje evoluciona lentamente, su mirada revelando una vulnerabilidad que contrasta con su aparente fortaleza. La película no se anda con rodeos en la exploración de sus dudas y su resistencia inicial ante la atracción de Daniel. Marek Geišberg como Daniel, un hombre marcado por el pasado y por la responsabilidad de su posición como educador, crea un personaje complejo y profundamente humano. Su presencia, con su sutil melancolía, añade una capa de introspección a la historia.
Sin embargo, es la interpretación de Éva Bandor como Agáva, la flor exótica que se convierte en catalizador del romance y la crisis personal, la que realmente roba el espectáculo. La presencia visual de Agáva, tanto en la fotografía como en la narrativa, es omnipresente y cargada de significado. El agave, en su floración, no es solo un símbolo del amor y la fertilidad, sino también de la memoria, del renacimiento y de la capacidad de superación. La película explora de forma magistral la conexión entre el pasado y el presente, entre la individualidad y el destino colectivo. El guion de Petr Svoboda es rico en detalles y en la evocación de la época, tejiendo con maestría las tensiones políticas y sociales de la posguerra, incluyendo las sombras de la era comunista que se cierne sobre la región. La historia no busca dar respuestas fáciles; se pregunta sobre las consecuencias de las decisiones individuales frente al peso del tiempo y la memoria.
La película logra una poderosa ambigüedad moral. No juzga a sus personajes, sino que los presenta como individuos atrapados en circunstancias complejas. "Agáva" es una meditación sobre el amor, la memoria, la responsabilidad y las cicatrices invisibles que deja la historia. Es una obra que exige reflexión y que, una vez terminada, sigue resonando en la mente del espectador. No es una película para todos los gustos, pero para aquellos que aprecien el cine que desafía, que invita a la reflexión y que se atreve a explorar las profundidades de la condición humana, “Agáva” es una experiencia cinematográfica inolvidable.
Nota: 8/10
Peliculas que te pueden interesar


La profesora

El informe Auschwitz

Pivnica
