American Pie presenta: El libro del amor (2009)

“American Pie presenta: El libro del amor” no pretende ser una obra maestra de la cinematografía. De hecho, en el momento en que entra en la sala, la expectativa es más por su legado dentro de la franquicia que por la promesa de una narrativa profunda. Sin embargo, la película logra ser sorprendentemente entretenida, aprovechando al máximo su premisa inicial para ofrecer una comedia adolescente convencional, aunque con un toque de nostalgia y elementos que quizás sorprendan a un espectador moderno.

La dirección de Andrew Nelton es pragmática, enfocándose en mantener el ritmo rápido y la comedia slapstick que caracterizan la serie. No se atreve a explorar zonas de riesgo o a cuestionar las problemáticas sociales que pudieran surgir de una trama centrada en la sexualidad adolescente. En cambio, se centra en las reacciones exageradas de los personajes y en los momentos de confusión y descoordinación que resultan de sus intentos fallidos de seducción. La puesta en escena es limpia y funcional, con una estética que recuerda a las producciones juveniles de los años 90, lo cual, paradójicamente, contribuye a la sensación de nostalgia que evoca la película.

Las actuaciones son, en general, aceptables. Jason Biggs, Devon Sues y Chris Owen, los actores principales, cumplen su papel, aunque no se espera un virtuosismo excepcional de sus interpretaciones. Chris Owen, en particular, destaca por su comicidad física y su capacidad para transmitir la torpeza y la ingenuidad de su personaje, Lube. Sin embargo, el elenco secundario aporta elementos importantes al humor, con personajes como Heather Graham y Allison Janney que, aunque con roles limitados, ofrecen momentos memorables.

El guion, como suele ocurrir en estas películas, es simple y predecible. La trama del "libro del sexo" es un cliché, pero se utiliza con eficiencia para generar situaciones cómicas y forzar el desarrollo de la historia. La película no se toma la sexualidad adolescente en serio, ni tampoco pretende generar debate, sino que se limita a explorar las consecuencias de los errores y las confusiones de los jóvenes. Los momentos de "comedia pura" abundan, a menudo a expensas de una posible profundidad temática. La inclusión de los ex-alumnos, a través de flashbacks, añade un elemento interesante, aunque a veces desorientador. Si bien son divertidos, no aportan una contribución significativa a la trama principal y pueden parecer un añadido más para mantener la ligereza general del filme.

En definitiva, “American Pie presenta: El libro del amor” es una comedia adolescente ligera y divertida, ideal para una noche de cine con amigos. No es una obra maestra, pero sí una película que cumple su cometido: entretener y hacer reír. No buscará la reflexión profunda ni la sorpresa intelectual, sino la risa fácil y la sensación de retroceso a una época más inocente, aunque a veces un tanto ingenua. Es una película que, a pesar de sus limitaciones, consigue conectar con el público que creció con la saga.

Nota: 6/10