Anonymous (2011)

“Anonymous” no es un biopic convencional de William Shakespeare. Es una intrincada novela histórica, un thriller de época con un núcleo intrigante que plantea una pregunta que ha fascinado a la crítica y al público durante siglos: ¿Quién escribió realmente las obras atribuidas a Shakespeare? La película, dirigida por Alejandro Agresti, se sumerge en la Inglaterra Isabelina, un periodo vibrante y peligroso marcado por las ambiciones, los secretos y la constante lucha por el poder. El escenario, Londres del siglo XVI, es meticulosamente recreado, con una atmósfera densa y palpable que te atrapa desde el principio. La película no se limita a presentar la época; la inmersiona en la vida de los actores, los nobles y los hombres de letras, convirtiéndolos en personajes complejos y profundamente humanos.

La película se centra en Ferdinando Wells, un restaurador de libros obsesionado con demostrar que Shakespeare era un pseudónimo. Su búsqueda lo lleva a colaborar con la investigadora Anne Shearlock, interpretada con una elegancia natural por Rachel Weisz. La química entre ambos personajes es uno de los puntos fuertes de la película, y la relación evoluciona de forma orgánica a lo largo de la trama. Sin embargo, la trama avanza a veces con una lentitud calculada que, aunque intencional para construir suspense, podría resultar tediosa para algunos espectadores. El guion, adaptado de un libro homónimo de Shelock Holmes, presenta un argumento denso y repleto de giros inesperados. Aunque la premisa original era interesante, la película, a veces, se pierde en demasiadas subtramas y en la complejidad de sus propios elementos conspirativos. Se le da demasiada importancia a la “investigación”, ralentizando el ritmo y restando fuerza a la narrativa principal.

Las actuaciones son, en general, sólidas. Austin Stowell III, como Ferdinando Wells, consigue transmitir la intensidad de su creencia y su obsesión con una mezcla de vulnerabilidad y determinación. Joseph Fiennes ofrece una interpretación enigmática de Lord Derby, un noble ambicioso y manipulador, pero su personaje, aunque presente, no alcanza el impacto dramático que podría haber tenido. Sin embargo, la actuación de Rachel Weisz es genuina y convincente, aportando una considerable profundidad emocional al personaje de Anne Shearlock. El director, Alejandro Agresti, ha logrado recrear la atmósfera opresiva y llena de intrigas de la época, utilizando una fotografía impecable y una banda sonora evocadora. La película no rehúye la violencia y la oscuridad del período, lo que refuerza la sensación de peligro y conspiración que impregna la trama.

En definitiva, “Anonymous” es una película que invita a la reflexión y que ofrece una nueva perspectiva sobre un personaje histórico legendario. Si bien el guion podría haber sido más conciso y el ritmo más ágil, la película consigue trasladar al espectador a un pasado fascinante y repleto de misterios. La ambición de Agresti en abordar un tema tan complejo se aprecia, aunque la ejecución no sea perfecta. A pesar de sus fallos, la película tiene un valor intelectual y estético que la convierte en una experiencia cinematográfica digna de ser contemplada.

Nota:** 6/10