Arma letal 4 (1998)

“Arma Letal 4” no reinventa la rueda, pero ofrece una dosis sólida de acción y un despliegue visual que, para los fans de la franquicia, es casi una obligación para la cartelera. Aunque el concepto original de Riggs y Murtaugh en la ciudad de Los Ángeles ya no tiene el impacto de su debut, la película se beneficia de la química innegable entre Mel Gibson y Danny Glover, quienes mantienen la tensión y el humor negro que caracterizaron la saga. La dirección de Steven Soderbergh, a pesar de no ser su terreno más habitual, aporta una frescura y un dinamismo a las secuencias de acción que, en mi opinión, elevan la experiencia. Soderbergh evita la sobrecarga de explosiones y tiroteos gratuitos, priorizando escenas de persecución más elaboradas y realistas, aprovechando la ciudad de Los Ángeles como un escenario en sí mismo. La planificación de las secuencias de acción es precisa, y la banda sonora, con el habitual rock, refuerza el ritmo frenético de la película.

El guion, escrito por Shane Black, se centra más en el desarrollo de la relación entre Riggs y Murtaugh que en la trama principal. La introducción del hijo de la hija de Murtaugh, Ethan, y su posterior amenaza de boda con Riggs, aporta un giro inesperado y añade una capa de drama familiar que, aunque a veces parece un poco forzada, funciona sorprendentemente bien. La presión familiar sobre Riggs, atormentado por su pasado y su tendencia a la autodestrucción, se explora de forma interesante, aunque no profundiza lo suficiente como para ofrecer una resolución real. La presencia de un capo de la mafia asiática, interpretado con una amenazante intensidad por Qui Dam, sirve como catalizador de la trama, pero el personaje queda algo plano y estereotipado, más un simple villano que un antagonista con motivaciones complejas.

Las actuaciones son, sin duda, uno de los puntos fuertes de la película. Mel Gibson ofrece una interpretación convincente de Riggs, transmitiendo a la perfección su mezcla de impulsividad, vulnerabilidad y autodestrucción. Danny Glover aporta la sabiduría y el pragmatismo necesarios para equilibrar la personalidad de Riggs. Aunque no se espera una actuación sobresaliente de los actores secundarios, todos cumplen su cometido, entregando personajes memorables aunque unidimensionales. Particularmente, la evolución del personaje de Ethan, a pesar de su reducido tiempo en pantalla, resulta gratificante y añade un matiz emocional que mejora el tono general de la película. La película, en general, no intenta ser una obra maestra cinematográfica; su éxito reside en su capacidad de entretener con una acción estimulante y un humor negro que, para algunos espectadores, puede resultar un poco cruel.

En definitiva, “Arma Letal 4” es un espectáculo explosivo y entretenido que, aunque no destaca por su originalidad, ofrece una dosis generosa de acción y un buen despliegue de la química entre sus dos protagonistas. La dirección de Soderbergh le da un dinamismo apreciable, y las actuaciones son sólidas. Es una película que cumple con las expectativas de sus fans y ofrece un buen rato en la cartelera.

Nota: 7/10