A.R.O.G (2008)

“A.R.O.G.” es, sin duda, una de las comedias más originales y sorprendentes que he visto en los últimos años. Cem Yılmaz, como siempre, logra una presencia carismática y dominante en la pantalla, llevando consigo un caos controlado que es la marca distintiva de su estilo cómico. Yılmaz no se limita a ser el “héroe” en el sentido tradicional; Arif es un hombre del siglo XXI, un tipo prepotente y egocéntrico que se ve repentinamente catapultado a un pasado remoto, forzado a asumir una responsabilidad que no pide ni desea. Esta situación de contraste – un genio tecnológico convertido en líder tribal – genera un humor que nace de la incomprensión, de la frustración y de la total incapacidad de Arif para adaptarse a un mundo donde la higiene personal es una leyenda y las leyes son las decisiones caprichosas de los líderes locales. La película explora con ingenio las paradojas del viaje en el tiempo, no como un vehículo para efectos especiales grandilocuentes, sino como una herramienta para amplificar las situaciones absurdas y la reacción de Arif ante ellas.

La dirección de Tayfun Erdohancı logra mantener un equilibrio perfecto entre el humor físico y la comedia de situación. Se evita la explotación burda y se centra en la inteligencia del guion, que es considerablemente sólido. Las situaciones se desarrollan de forma orgánica, como si fueran la consecuencia lógica de las decisiones tomadas por Arif, aunque sean inherentemente estúpidas. La película no rehúye de los clichés del género, pero los utiliza con un humor sutil y auto-consciente. El uso de la cámara es dinámico, acompañando la frenética acción y las reacciones exageradas de Arif, creando un ritmo frenético y visualmente estimulante. La banda sonora, con canciones pop del siglo XXI mezcladas con melodías ancestrales, contribuye a la atmósfera única y surrealista de la película.

Las actuaciones son excepcionales. Además de la evidente química entre Yılmaz y Cem Saltık (que interpreta a Ozan, el alocado compañero), Özkan Uğur, en su breve pero impactante aparición, aporta un toque de locura y caos que complementa a la perfección el tono general de la película. Sin embargo, sería injusto no destacar la capacidad de humor físico de Saltık; su interpretación es contagiosa y le permite aportar momentos de puro deleite cómico. La química entre los tres actores es palpable, y sus interacciones son el corazón de la película.

En definitiva, “A.R.O.G.” es una comedia inteligente y original que desafía las expectativas del género. Aunque algunos podrían encontrarla un poco exagerada en su humor, la película es, en gran medida, una celebración de la locura y una reflexión divertida sobre la naturaleza humana. Es una experiencia cinematográfica memorable que recomiendo encarecidamente a aquellos que buscan una comedia que no se tome demasiado en serio a sí misma. La película supera las convenciones del viaje en el tiempo y se convierte en un espejo distorsionado donde el presente y el pasado se encuentran en un baile impredecible.

Nota: 8/10