Bandolero! (1968)

“Bandolero!” es un western moderno que, aunque no alcanza la grandeza de algunos clásicos del género, ofrece un entretenimiento sólido y, en ciertos momentos, sorprendentemente interesante. Dirigida con un pulso firme por John Huston, la película se adentra en la tensa relación entre dos hermanos, Caleb y Daniel Bishop (Dean Martin y James Stewart), dos hombres radicalmente diferentes forzados a colaborar para sobrevivir a una sentencia capital. La película, estrenada en 1965, no busca reinventar la rueda del género western, pero sí lo complementa con una capa de complejidad psicológica que, aunque no siempre se explora con la profundidad que se merece, es un acierto.

La dirección de Huston es precisa y evita la sobreexposición visual, enfocándose en la atmósfera opresiva de la frontera texana. Los exteriores son espectaculares, capturando la inmensidad del paisaje y la dureza de la vida en aquel tiempo. La banda sonora, compuesta por Elmer Bernstein, es fundamental para el ambiente; melodías melancólicas y ritmos que reflejan la desesperación y el peligro constantes. Sin embargo, la película no se conforma con simplemente mostrarnos un paisaje desértico. Huston utiliza el espacio y la iluminación para subrayar el aislamiento de los personajes y la inminencia de la muerte.

Las actuaciones son, sin duda, uno de los puntos fuertes de “Bandolero!”. Dean Martin, en un papel que le sienta especialmente bien, aporta una elegancia y un carisma cautivador a Caleb Bishop, un hombre marcado por el pasado y con un sentido del honor inflexible. James Stewart, por su parte, ofrece una interpretación particularmente convincente como Daniel Bishop, un hombre atormentado por sus errores y que busca desesperadamente redimirse. La química entre los dos actores es palpable y su relación evoluciona de la desconfianza inicial a una inesperada camaradería, fruto de la necesidad. La interpretación de Frank Sinatra como el despiadado Sheriff Thompson, aunque breve, también es destacable, dotando al antagonista de una amenaza real y creíble.

El guion, coescrito por Huston y Michael A. Wilson, es donde la película se queda a medio camino. Si bien la premisa – dos hermanos condenados a muerte que deben unirse para escapar – es interesante, la ejecución a veces resulta un tanto predecible. Algunos diálogos se sienten forzados y la tensión dramática, aunque presente, no siempre se mantiene sostenida. Sin embargo, la película consigue crear momentos de genuina emoción, especialmente en las escenas de confrontación y en la exploración de la relación fraternal. La historia, aunque no es original, está bien contada y mantiene al espectador enganchado hasta el final. Se intuye un deseo de explorar la complejidad moral de los personajes y las consecuencias de sus actos, pero esto queda frustrado por algunos momentos de simplificación narrativa. Se podría haber profundizado más en la historia personal de cada uno, lo que le habría dado un mayor peso emocional.

En definitiva, “Bandolero!” es un western sólido y entretenido que, a pesar de sus defectos, ofrece una buena dosis de acción, suspense y personajes interesantes. La dirección es competente, las actuaciones son sólidas y la banda sonora es memorable. Un clásico moderno del género que, a pesar de no alcanzar la cima, merece la pena ser visto.

Nota: 7/10