Basic (2003)

“Basic” no es una película que deje un impacto duradero, pero tampoco es un fiasco absoluto. Más bien, se presenta como una producción de acción militar que, en su ejecución, se queda a medio camino entre lo entretenido y lo olvidable. La película se basa en una premisa intrigante: una misión de entrenamiento que se descontrola, dejando a un equipo de Rangers desaparecido y un brillante interrogador (John Travolta) en la tarea de desentrañar la verdad. La película explora temas de lealtad, traición y la fragilidad de la moral en entornos extremos, aunque estas ideas se exploran con una profundidad que le falta a veces al ritmo frenético del género.

La dirección de Michael Winterbottom, conocido por su estilo particular y a menudo controvertido, se observa en el uso de la cámara y el montaje. Hay una insistencia en la perspectiva del personaje de Tom Hardy, lo que nos sumerge en su proceso de interrogación y, a su vez, en la tensión que permea la investigación. Sin embargo, este enfoque, aunque efectivo en ciertos momentos, puede resultar un tanto repetitivo y, en ocasiones, dificulta la comprensión de la narrativa. El espectador se siente constantemente a la altura del interrogador, lo cual puede resultar en una sensación de desconexión. El uso de planos cerrados y la atmósfera claustrofóbica son efectivos, pero no logran compensar la falta de originalidad en la dirección general.

Samuel L. Jackson ofrece una interpretación sólida como el sargento Nathan West, un hombre curtido por la guerra y, aparentemente, con una cierta oscuridad en su interior. Su personaje no es simplemente un líder militar, sino un hombre que ha visto demasiado y que, quizás, se ha dejado corromper por el ambiente hostil en el que opera. John Travolta, por otro lado, está en su mejor momento en años como el agente Tom Hardy. Su presencia imponente y su interpretación, que bebe de su experiencia en dramas psicológicos, es el punto fuerte de la película. La química entre Travolta y Jackson es notoria y contribuye significativamente al desarrollo del conflicto central.

El guion, escrito por Michael Finch y Jonathan Feigan, es donde la película más notablemente se queda corta. La trama, si bien promete, carece de la sutileza y la complejidad que se esperarían de un thriller de espías. Los diálogos son a menudo expositivos y poco naturales, y la resolución final, aunque satisfactoria para algunos, resulta un tanto abrupta e incluso simplista. Se plantean preguntas sobre la ética en las operaciones encubiertas, pero la exploración se limita a los bordes de la reflexión, sin profundizar en las implicaciones morales. Se siente que se han dejado muchas oportunidades para una trama más rica y matizada.

A pesar de sus deficiencias, "Basic" ofrece un espectáculo visualmente atractivo y un buen entretenimiento para aquellos que disfrutan del género de acción militar. La película destaca por las interpretaciones de John Travolta y Samuel L. Jackson, pero el guion, aunque prometedor, no logra alcanzar su potencial. Es una película decente, pero que, en general, deja el espectador con una sensación de "meh".

Nota:** 6/10