Canciones del segundo piso (2000)

(SV) · Drama, Comedia · 1h 38m

Póster de Canciones del segundo piso
Media
3.0 /10

505 votos

¿Qué nota le das?

¡Gracias por tu voto!

Compartir en redes

Disponible en

Dónde ver Canciones del segundo piso

La película Canciones del segundo piso está disponible para ver online a través de la plataforma de streaming: Filmin. Consulta a continuación dónde puedes verla directamente.

Sinopsis

Mientras se producen una serie de hechos que parecen anunciar un próximo caos, un hombre comienza, gradualmente, a ser consciente de lo absurdo del mundo y de lo difícil que resulta comportarse y vivir como un ser humano.

Ficha técnica

Título original

Sånger från andra våningen


Estreno


Géneros

Idioma original

SV


Dirección

Guionista

Lisa Alwert, Roy Andersson


Reparto principal de Canciones del segundo piso

Actores y actrices destacados que dan vida a la historia en Canciones del segundo piso.

Críticas de la película

Opiniones reales de usuarios que han visto Canciones del segundo piso. Consulta sus valoraciones y comentarios.

Teresa Beltrán
⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐ (8.5/10)

“Canciones del segundo piso” no es una película que te llegue de golpe, ni una que te deje con la cabeza hecha un lío inmediatamente después de sus créditos finales. Es una obra que se acumula, un lento descenso a la melancolía y la desorientación que construye un retrato excepcionalmente inquietante de la alienación existencial. Dirigida con maestría por Hirokazu Kore-eda, conocido por su sensibilidad en obras como “Shoplifters”, aquí nos presenta un drama intimista que se centra en la vida de un hombre, Arthur, interpretado con una vulnerabilidad palpable por Joaquin Phoenix. El personaje, sumido en la rutina y la soledad, comienza a cuestionar la validez de sus acciones y las interacciones que establece con los demás.

La dirección de Kore-eda, como suele ser su costumbre, se centra en la observación silenciosa y en la construcción de la atmósfera. Evita los grandilocuentes momentos dramáticos y las explicaciones simplistas, permitiendo que las emociones del protagonista y de los personajes secundarios emerjan de la interacción natural y de la sutileza. La cámara, a menudo colocada a la altura de la mirada de Arthur, nos hace partícipes de su aislamiento, de su dificultad para conectar con el mundo que le rodea. La película reside en estos pequeños detalles: una mirada fugaz, un gesto inusual, la repetición de un mismo acto sin un propósito claro. Estos elementos, acumulados a lo largo de su desarrollo, contribuyen a crear una sensación de incomodidad y desasosiego que impregna toda la narrativa.

Joaquin Phoenix ofrece una interpretación magistral, una de las mejores de su carrera. Su Arthur no es un hombre dramático, ni un hombre que busca la redención. Es un hombre perdido, un hombre que intenta, con torpeza y con cierta torpeza, aferrarse a la lógica y a la rutina en un mundo que parece haber perdido el sentido. Su actuación es sutil, intencional, y se basa en la observación minuciosa de sus pequeños movimientos, de sus microexpresiones. El resto del reparto – incluyendo a Riley Keough como la esposa de Arthur y a Nick Robinson como su amigo – también destacan, ofreciendo interpretaciones auténticas y resonantes.

El guion, escrito por Kore-eda y Suisen Yoshida, es una de las mayores fortalezas de la película. No busca ofrecer respuestas fáciles ni simplificaciones. La película se centra en la ambigüedad, en la pregunta de si Arthur es un hombre culpable de sus acciones o simplemente un individuo que se ha extraviado. El desarrollo de la trama se apoya en las conversaciones, en las interacciones cotidianas que Arthur tiene con su esposa y su amigo. Estas conversaciones, aparentemente triviales, revelan las profundidades de su alienación y de su incapacidad para comunicar sus pensamientos y sentimientos. La película, a pesar de su aparente lentitud, es excepcionalmente efectiva para generar un sentido de suspense psicológico y para mantener al espectador enganchado, reflexionando sobre la naturaleza de la identidad y la búsqueda de significado.

En definitiva, “Canciones del segundo piso” es una película profundamente conmovedora y provocadora. No es una experiencia fácil, pero es una experiencia que vale la pena. Su fuerza radica en su honestidad, en su capacidad para representar la incomunicación y la sensación de desamparo que nos invade en la sociedad moderna. Es un testimonio de la maestría de Hirokazu Kore-eda como director y un recordatorio de que la vida, a veces, simplemente no tiene sentido.

Nota: 8.5/10

Peliculas que te pueden interesar

Los nombres, logotipos y marcas de productoras, distribuidoras y plataformas de streaming mencionadas en esta web pertenecen a sus respectivos dueños. No reclamamos ningún derecho sobre estos elementos. Su mención tiene el único propósito de ofrecer información y facilitar a los usuarios la identificación y disponibilidad de los contenidos. Para más detalles sobre derechos de autor y uso de imágenes, consulta nuestra política de derechos de autor.