Cigüeñas (2016)

“Cigüeñas” (Storks) es una película sorprendente, una joya inesperada que desafía las expectativas del público con su premisa original y su ejecución visualmente impecable. Doug Sweetland, el talentoso director detrás de “Presto”, regresa con una comedia familiar que, a primera vista, podría parecer sencilla, pero que, en realidad, es una fábula rica en significado sobre la paternidad, la responsabilidad y la redención.

La película sigue a Junior, un repartidor de cigüeñas de élite, interpretado con una mezcla de arrogancia y vulnerabilidad por Adam Driver. Su mundo, una ciudad flotante construida en las montañas, está en crisis. La antigua misión de las cigüeñas – llevar bebés a los padres – ha sido reemplazada por el envío de paquetes de internet, pero Junior se resiste a esta nueva realidad y anhela recuperar la esencia de su legado. Cuando accidentalmente activa la Máquina de Producción de Bebés, queda en una situación comprometida, forzado a cuidar de una niña, Luna, que no pertenecía a ninguna familia.

La dirección de Sweetland es notable, creando un universo visualmente cautivador y lleno de detalles sorprendentes. La ciudad de las cigüeñas, con sus complejas estructuras y su arquitectura peculiar, es un invento brillante que parece sacado directamente de un sueño. La animación es de una calidad excepcional, especialmente en el diseño de las cigüeñas, que son personajes entrañables y expresivos. La banda sonora, compuesta por Nicholas Britell, complementa a la perfección la atmósfera de la película, realzando los momentos de tensión y los momentos más emotivos.

Adam Driver ofrece una actuación contundente, mostrando un rango de emociones que va desde la frustración y la desesperación hasta la ternura y la compasión. Jennifer VanSlyke, como Tulip, aporta un toque de humor y sabiduría a la historia, y su dinámica con Junior es uno de los pilares del éxito de la película. Sin embargo, la película no se centra únicamente en los personajes principales; también explora con sensibilidad los temas de la familia y la adopción. La relación entre Junior y Luna evoluciona de manera natural, transformando la urgencia de evitar un escándalo en una búsqueda de un nuevo propósito.

Si bien la trama principal es sólida, “Cigüeñas” no está exenta de algunos momentos predecibles. El ritmo puede ser un poco irregular en algunos puntos, y algunas de las secuencias de acción, aunque visualmente interesantes, no alcanzan la misma intensidad que otros elementos de la película. No obstante, estos pequeños detalles no restan valor a la experiencia general, que es, en su mayor parte, entretenida y conmovedora. La película logra equilibrar a la perfección la comedia y la sensibilidad, ofreciendo una reflexión sobre la definición de familia y el valor de la responsabilidad.

Nota: 7.5/10