Cliff Walkers (2021)

“Cliff Walkers” (Caminantes de Cliff) no es la película de espías clásica que quizás esperabas, ni tampoco una epopeya bélica expansiva. Más bien, es una pieza de suspense psicológico densa y oscura, ambientada en la atmósfera glacial de Manchukuo en los años 30, un territorio en decadencia y lleno de ambigüedad moral. La película, dirigida por Frank Pietranik, se centra en la desesperación y la supervivencia de un equipo de agentes chinos infiltrados en territorio japonés, y aunque el tono general es sombrío, la película ofrece una mirada fascinante a un período histórico poco explorado y a las complejidades de la guerra fría antes de su institucionalización.

La dirección de Pietranik es meticulosa y, a menudo, claustrofóbica. Los paisajes nevados de Manchukuo, filmados con una paleta de colores apagados y una cinematografía fría y estática, se convierten en personajes en sí mismos. La película no se apresura a mostrar la acción, sino que se concentra en la construcción del suspense, la tensión y la desconfianza entre los personajes. Los movimientos de cámara son deliberados, enfatizando el aislamiento y la vulnerabilidad del equipo. Sin embargo, la lentitud, que a veces puede percibirse como excesiva, es fundamental para crear la sensación de peligro inminente que domina la narrativa.

El elenco ofrece interpretaciones sólidas. Jimmy Cheung, como el líder del equipo, muestra una mezcla de determinación, cansancio y duda. Su personaje, marcado por un pasado traumático, es la piedra angular de la película y la actuación de Cheung es convincente. La dinámica entre los cuatro agentes, interpretados por un equipo diverso, es el corazón de la historia. La sospecha y la traición, tanto interna como externa, son constantes y generan un ambiente de paranoia palpable. Es especialmente notable la actuación de Li Jia en su papel de Xia, una agente con un pasado misterioso y un papel crucial en el desarrollo de la trama.

En cuanto al guion, “Cliff Walkers” se distingue por su ambigüedad y su falta de soluciones fáciles. La película no ofrece un simple enfrentamiento entre héroes y villanos. El establecimiento de Manchukuo como un estado en transición, lleno de intereses en conflicto y traiciones, añade una capa de complejidad a la trama. La película explora las consecuencias de la guerra, no solo en el campo de batalla, sino también en las vidas de las personas que quedan atrás, obligadas a navegar por un paisaje moralmente gris. La ausencia de clichés de espías – explosiones exageradas, secuencias de persecución espectaculares – refuerza la atmósfera realista y la sensación de peligro inminente. La película, sin embargo, podría haberse beneficiado de un desarrollo más profundo de algunos personajes secundarios y una mayor claridad en algunas de las motivaciones de los antagonistas.

A pesar de algunas pequeñas imperfecciones, "Cliff Walkers" es una película de espías sofisticada y reflexiva, que merece la pena ver a aquellos interesados en historias de suspense con un enfoque en la moralidad, la ambigüedad y la supervivencia en condiciones extremas. Ofrece una perspectiva poco conocida de un período histórico complejo y plantea preguntas importantes sobre la naturaleza de la guerra y el precio de la resistencia.

Nota: 7/10