Colegas en el bosque 2 (2008)

“Colegas en el Bosque 2” es, en esencia, un refrito familiar que intenta capitalizar la nostalgia por la película original de 1988, pero que termina siendo una experiencia de visionado notablemente menos satisfactoria. La película, dirigida por Bill Kelly, se aferra a la fórmula del primer filme, la historia de amistad entre un niño y un grupo de animales parlantes, pero esta vez, el conflicto central se centra en el secuestro de Mr. Weenie, el excéntrico vendedor de pelotas de goma. El detonante – la exigencia de un grupo de mascotas para devolver a su dueño – proporciona un pretexto conveniente para la aventura, pero no logra infundir la película con una verdadera urgencia o un conflicto emocional convincente.

La dirección, en general, es competente pero carece de imaginación y dinamismo. La película se mueve a un ritmo pausado, a menudo demasiado lento, lo que resta interés al desarrollo de la trama. Aunque las animaciones son decentes para su época, la estética visual se siente un poco anticuada y carece de la vibrancia que haría que el bosque y sus habitantes tuvieran una mayor presencia en pantalla. Kelly parece más preocupado por seguir los pasos del original que por innovar, y ese enfoque resulta en una experiencia más repetitiva que emocionante.

El reparto de voces es un punto fuerte de la película. La química entre los actores que dan voz a los personajes – Elliot (Daniel Stern), Boog (Jim Varney), McSquizzy (John Matthews), Buddy (Tom Wilson) y las mascotas – es sólida y proporciona momentos cómicos genuinos. Sin embargo, incluso las actuaciones más destacadas no pueden compensar la falta de profundidad en los personajes. Boog, interpretado por Jim Varney, se mantiene como el elemento más divertido, pero sus constantes bromas y su actitud hiperactiva a veces se vuelven cansados. El guion, por su parte, es el elemento más débil de la película. Las situaciones son predecibles y los diálogos, en su mayoría, son de una simplicidad exasperante. Se recurre a chistes fáciles y a clichés cómicos que, tras verlos repetidos una y otra vez, pierden su impacto.

La trama, aunque inicialmente intrigante con el secuestro de Mr. Weenie, se desvanece rápidamente. La lucha contra las mascotas, liderada por la formidable Fifi (un personaje notablemente carismático), es divertida en su momento, pero la resolución es apresurada y no deja una impresión duradera. La película termina con la típica resolución sentimental, centrada en la importancia de la amistad y la familia, que, aunque apropiada para el género, carece de originalidad y poder emocional. “Colegas en el Bosque 2” es, en definitiva, una película olvidable, un intento de revivir un clásico que, lamentablemente, no logra emular el encanto y la frescura de su predecesora. Una producción más que un capricho nostálgico.

Nota: 5/10