Cómo conquistar Hollywood (1995)

“Cómo Conquistar Hollywood” es, en su esencia, una comedia negra que, aunque no alcanza la altura de las películas de Martin Scorsese sobre la industria del entretenimiento, ofrece una mirada divertida y a menudo irreverente sobre las oscuras particularidades de la búsqueda del éxito en Los Ángeles. La película, dirigida por Eli Roth, no se preocupa por retratar Hollywood como un lugar de sueños cumplidos; lo presenta como un terreno fértil para la ambición desmedida, la corrupción y la desilusión.

Roth logra un tono que oscila entre el humor negro y la violencia estilizada, algo con lo que el director ya tiene experiencia, y que aquí se manifiesta de manera particularmente efectiva. La puesta en escena es vibrante, saturada de colores brillantes y de excesos visuales que evocan la atmósfera glamurosa y artificial de la ciudad. Sin embargo, esta sobrecarga estética a veces funciona en contra del ritmo, ralentizando la narrativa en algunos momentos innecesariamente. La banda sonora, a pesar de ser de alta calidad, a veces se siente demasiado estridente y alejada de la historia.

La película se centra en Chili Palmer, interpretado con una carisma inquietante por Paul Rudd, un con manifa que se ve arrastrado a un plan para robar dinero a un director mediático. Rudd ofrece una actuación sólida, transmitiendo con gran facilidad la desesperación de su personaje, atrapado en una situación que va escalando rápidamente. La química entre Rudd y Samara Weaving, quien interpreta a Maya, la estrella de cine con la que se involucra Chili, es uno de los puntos fuertes de la película. La Weaving es convincente como una figura melancólica y compleja, que no es simplemente una musa, sino una persona con sus propias motivaciones y secretos. El resto del elenco, incluyendo a Bill Hader, aporta igualmente personajes memorables y caricaturescos.

El guion, escrito en gran parte por Roth, es un laberinto de giros argumentales que, aunque a veces un poco rebuscados, mantiene al espectador enganchado. La historia, en su núcleo, explora temas como la moralidad, la ambición y la búsqueda de la identidad. Sin embargo, el guion se pierde a veces en la complejidad de la trama, con algunos diálogos que se sienten forzados o innecesariamente floridos. La película aborda la brecha entre la promesa de Hollywood y la realidad brutal, y critica sin tapujos la superficialidad y el egoísmo de la industria. No obstante, la película no ofrece una reflexión profunda sobre estos temas, limitándose a presentar una situación cómica y llena de acción.

En definitiva, “Cómo Conquistar Hollywood” es una comedia negra entretenida, con un ritmo ágil y un elenco talentoso. Aunque no es una obra maestra del cine, cumple su cometido de entretener y divertir al espectador, ofreciendo una mirada salpicada de humor y violencia sobre el lado oscuro de la industria del cine. No es un análisis exhaustivo, pero sí una buena distracción para aquellos que disfrutan de este tipo de películas.

Nota: 6.5/10