Dabbe 2 (2009)

“Dabbe 2” no es una película para ser tomada con la seriedad de un thriller psicológico, ni mucho menos una reconstrucción de la película original de 1973. Es, sin embargo, una experiencia cinematográfica visceral y perturbadora, una inmersión en una atmósfera de terror digital que recuerda a las pesadillas más inquietantes. La película, dirigida por Pervaiz Mohsin, no intenta replicar la atmósfera lenta y deliberada de la primera entrega; en cambio, opta por una dirección frenética y saturada de efectos visuales que, aunque a veces excesivos, contribuyen a la sensación general de caos y paranoia.

La película se centra en la amenaza de Dabbe, una entidad espectral que ha regresado para aprovecharse de las vulnerabilidades de la red. Sefa Zengin, en un papel central, ofrece una actuación convincente, transmitiendo una presencia amenazante y perturbadora que se intensifica a medida que la película avanza. Su Dabbe no es simplemente un demonio; es una manifestación de los miedos y ansiedades de una sociedad cada vez más conectada, un producto de la información que corremos constantemente. Los actores de apoyo, particularmente Leyla Göksun, logran mantener el ritmo infernal de la trama, aportando credibilidad y tensión a sus roles.

El guion, escrito por Pervaiz Mohsin, es, quizás, el punto más controvertido de la película. Es audaz, sí, pero también confuso y a veces predecible. La trama se complica con demasiados elementos – la red, los recuerdos, la información – lo que dificulta la comprensión del verdadero propósito de Dabbe y su conexión con el pasado. Aunque las referencias a la película original son interesantes, se sienten un poco forzadas y no siempre logran resonar plenamente. La película, por lo tanto, corre el riesgo de resultar densa y poco clara para el espectador que no esté familiarizado con el mito de Dabbe.

A pesar de sus defectos, "Dabbe 2" merece la pena ser vista por aquellos que buscan experiencias cinematográficas que trasciendan los clichés del género. La película explora temas relevantes como la adicción a la tecnología, la pérdida de la identidad en el mundo digital y la fragilidad de la realidad. El uso de la tecnología como un portal a un infierno, tanto real como virtual, es particularmente efectivo y crea un ambiente de tensión constante. La banda sonora, en particular, es un componente clave que amplifica la atmósfera opresiva, utilizando sintetizadores y sonidos distorsionados para crear una sensación de inquietud y terror. Aunque el resultado no siempre es perfecto, “Dabbe 2” es un experimento inquietante que deja una huella duradera en la memoria del espectador, un recordatorio de los peligros ocultos en la intersección de la tecnología y la oscuridad.

Nota: 6/10