Del revés (Inside Out) (2015)

“Del revés (Inside Out)” no es solo una película de animación, es una experiencia cinematográfica que, sorprendentemente, provoca una profunda reflexión sobre la naturaleza del ser humano. Pixar ha logrado, con una maestría técnica y narrativa innegable, una historia que va mucho más allá de la comedia y la fantasía, abordando temas complejos como la identidad, el duelo y la importancia de las emociones, incluso aquellas que percibimos como negativas. La película, dirigida por Pete Docter y Richard Wenk, no se limita a presentar un mundo imaginario habitado por emociones antropomórficas; establece una conexión emocional con el espectador que resulta profundamente conmovedora.

La animación es, evidentemente, de un nivel impresionante. Cada emoción, desde la exuberante Alegría (Joy) hasta la melancólica Tristeza (Sadness), está representada con un diseño visual rico y detallado. La paleta de colores es vibrante y acorde con la personalidad de cada emoción, pero es la manera en que se utilizan los movimientos y la expresividad de los personajes lo que realmente eleva la película. La representación de la mente de Riley, con sus paisajes urbanos y sus edificios emocionales, es una obra de arte visual que se integra perfectamente en la narrativa. Es un diseño de producción exquisito, que no busca solo ser visualmente atractivo, sino que también sirve para comunicar visualmente la complejidad de los pensamientos y sentimientos de la protagonista.

La fuerza de la película reside, sin embargo, en su guion. La premisa de que la Tristeza es esencial para el desarrollo personal de Riley es un concepto original y revelador. Antes de “Inside Out”, la tristeza era considerada un enemigo, algo que debía ser combatido. La película, a través de la aventura de Riley y sus emociones, nos enseña que la tristeza es fundamental para el aprendizaje, el crecimiento y la apreciación de la felicidad. Las actuaciones de los actores de voz son excepcionales, especialmente Riley Anderson, interpretada por Audra McDonald, cuya voz transmite con sutileza la evolución emocional de la niña. El resto del reparto – Kyleigh Williams como Riley de niña, Edward Norton como el padre de Riley – ofrecen interpretaciones sólidas y convincentes.

Además, la película aborda la pérdida con sensibilidad y honestidad. El duelo de Riley por la muerte de su abuela es tratado con respeto y sin simplificaciones. Se explora el proceso de adaptación a la pérdida, la nostalgia y la necesidad de encontrar una manera de honrar la memoria de los seres queridos. La historia de Riley se convierte, en última instancia, en una reflexión sobre la importancia de aceptar la vida en todas sus facetas, con sus alegrías y sus tristezas. “Inside Out” no ofrece respuestas fáciles, pero sí nos invita a cuestionar nuestras propias percepciones sobre las emociones y a valorar la complejidad de la experiencia humana. La película es una celebración del equilibrio emocional y una lección valiosa para todas las edades.

Nota: 9/10