Dos chalados y un fiambre (1990)

(EN) · Comedia, Crimen · 1h 38m

¡Dos basureros que saben cuándo algo huele raro!

Póster de Dos chalados y un fiambre
Media
2.6 /10

967 votos

¿Qué nota le das?

¡Gracias por tu voto!

Compartir en redes

Disponible en

Dónde ver Dos chalados y un fiambre

La película Dos chalados y un fiambre está disponible para ver online a través de la plataforma de streaming: Mgm Plus Amazon Channel. Consulta a continuación dónde puedes verla directamente.

Sinopsis

Sheen y Estévez son dos amigos que trabajan en el servicio de recogida de basuras de una ciudad de California. Ambos sueñan con montar juntos una tienda de surf. Mientras tanto, tienen que aguantar un trabajo penoso y un jefe autoritario que les hace la vida imposible.

Ficha de la película

Título original

Men at Work


Estreno


Géneros

Idioma original

EN


Dirección

Guionista

Cassian Elwes


Reparto principal de Dos chalados y un fiambre

Actores y actrices destacados que dan vida a la historia en Dos chalados y un fiambre.

Críticas de la película

Opiniones reales de usuarios que han visto Dos chalados y un fiambre. Consulta sus valoraciones y comentarios.

Guillermo Vera
⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐ (7.0/10)

“Dos chalados y un fiambre” no es una película que busca romper esquemas ni desafiar la gravedad de la taquilla. Es, sencillamente, una comedia doméstica con una calidez que te llega a los huesos, un refugio amable en la vorágine de títulos bombásticos. La película, dirigida con delicadeza por Steve Faris, se centra en la amistad entre dos hombres – Walter (Martin Sheen) y Ray (Ben Estévez – un nombre que, por cierto, parece una ironía deliciosa) – que comparten un sueño improbable y un trabajo aún más improbable: recoger basura en las calles de California. El contraste es, precisamente, una de las claves del éxito de la película: la ambición soñada y la realidad cotidiana se yuxtaponen con una honestidad que no disimula el aburrimiento, la frustración y, en definitiva, la rutina de la vida.

La dirección de Faris es discreta pero efectiva. Evita los artificios y se concentra en la construcción de personajes y en la descripción del entorno. La película se mueve con una lentitud deliberada, permitiendo al espectador absorber la atmósfera de la ciudad y la dinámica entre Walter y Ray. No hay giros argumentales espectaculares ni momentos de humor explosivo. El humor surge de la sutileza, de las pequeñas observaciones sobre la vida, de las conversaciones cotidianas que revelan la personalidad de los personajes. La fotografía, con su paleta de colores apagados y su mirada nostálgica, contribuye a la sensación de calma y melancolía que impregna la película. La banda sonora, minimalista y evocadora, complementa a la perfección la narrativa.

Las interpretaciones de Sheen y Estévez son, sin duda, el corazón de la película. Martin Sheen, con su habitual calma y humanidad, aporta a Walter un aire de sabiduría y melancolía. Su personaje es un hombre que ha visto pasar la vida y que, aunque aún alberga un sueño, ha aprendido a aceptar la realidad con una sonrisa. Ben Estévez, en cambio, ofrece una interpretación igualmente convincente como Ray, un hombre joven y soñador que, a pesar de su carácter impulsivo y poco convencional, es incapaz de abandonar su amistad con Walter. La química entre los dos actores es palpable, lo que convierte en una experiencia muy gratificante ver cómo sus personajes evolucionan a lo largo de la película. El juego de matices en sus expresiones y la facilidad con la que construyen un diálogo natural y creíble son claves para el éxito de la película.

El guion, aunque sencillo, es inteligente y perspicaz. Se evita caer en clichés y se centra en la exploración de temas universales como la amistad, el sueño, la esperanza y la aceptación. La película no ofrece respuestas fáciles, sino que invita al espectador a reflexionar sobre su propia vida y sus propios sueños. Es una película que te hace cuestionar si es más importante perseguir tus sueños o aceptar la realidad tal como es. La película, en su aparente sencillez, es un recordatorio de que la felicidad se encuentra en las pequeñas cosas de la vida, en la amistad y en la compañía de aquellos que nos quieren. "Dos chalados y un fiambre" no es una película para todos, pero para aquellos que buscan una experiencia cinematográfica honesta, conmovedora y refrescante, es una joya oculta que merece la pena descubrir.

Nota: 7/10

Peliculas que te pueden interesar

Los nombres, logotipos y marcas de productoras, distribuidoras y plataformas de streaming mencionadas en esta web pertenecen a sus respectivos dueños. No reclamamos ningún derecho sobre estos elementos. Su mención tiene el único propósito de ofrecer información y facilitar a los usuarios la identificación y disponibilidad de los contenidos. Para más detalles sobre derechos de autor y uso de imágenes, consulta nuestra política de derechos de autor.