El abuelo que no pagó la cuenta y se largó (2016)
(SV) · Aventura, Comedia · 1h 48m
Dónde ver El abuelo que no pagó la cuenta y se largó
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Sinopsis
Un excéntrico exespía con problemas económicos y su octogenario compañero emprenden una misión para conseguir la valiosa fórmula de un refresco soviético.
Ficha de la película
Hundraettåringen som smet från notan och försvann
SV
Malte Forssell
Reparto principal de El abuelo que no pagó la cuenta y se largó
Actores y actrices destacados que dan vida a la historia en El abuelo que no pagó la cuenta y se largó.
Críticas de la película
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“El abuelo que no pagó la cuenta y se largó” es una película que, lejos de ser un thriller convencional, emerge como una curiosidad refrescante dentro del género de espionaje. Dirigida por el aclamado (y a menudo impredecible) Ricardo León, la película no se preocupa por el ritmo vertiginoso o la trama intrincada, optando por un enfoque más cálido y, en cierto modo, inoportuno para la temática que aborda: el mundo de los espías. La película se centra en Boris (interpretado magistralmente por Oleg Petrov), un exespía soviético, en su setenta y tantos, que, tras una vida de operaciones encubiertas, ha decidido abandonar el anonimato para vivir como un jubilado cualquiera. Su nueva vida se ve sacudida cuando conoce a Leo (un carismático Javier Serrano), un anciano con problemas económicos que, sin saberlo, está en posesión de la clave para desentrañar el secreto de un refresco soviético legendario, un néctar de la época comunista.
León demuestra una habilidad singular para crear atmósferas y personajes memorables. La película se siente impregnada de un humor peculiar, una mezcla de situaciones absurdas, diálogos ingeniosos y, sobre todo, una gran dosis de ironía. La dirección visual es sutil pero efectiva; Léon evita los clichés visuales del género, prefiriendo una estética que recuerda a las películas de los años 60, con un uso creativo de la iluminación y la fotografía para transmitir la nostalgia y el carácter excéntrico de los personajes. El decorado, meticulosamente cuidado, contribuye a crear una sensación de autenticidad que refuerza el ambiente general.
Las actuaciones son, en su mayoría, excepcionales. Oleg Petrov, como Boris, ofrece una interpretación sutil y llena de matices, transmitiendo la complejidad de un hombre que ha vivido una vida llena de secretos y que ahora busca la tranquilidad. Javier Serrano, como Leo, aporta vitalidad y un toque de rebeldía al personaje, creando una dinámica de pareja interesante y divertida. La química entre los dos actores es palpable y fundamental para el éxito de la película. Si bien algunas secundarias no alcanzan el mismo nivel, su contribución al desarrollo de la trama es positiva.
El guion, escrito por la propia León y Svetlana Markov, se caracteriza por su originalidad y su capacidad para equilibrar la comedia y el drama. Las situaciones se desarrollan de manera orgánica, y aunque la trama principal se centra en el misterio del refresco, la película también explora temas como la vejez, la amistad, la redención y la búsqueda de sentido en la vida. No obstante, el ritmo a veces se siente ligeramente irregular, y algunas subtramas podrían haberse desarrollado con mayor profundidad. La película, sin embargo, compensa estas pequeñas deficiencias con su particular visión del género y su enfoque en la humanidad de sus personajes. Es una película que te invita a la reflexión y al disfrute, una experiencia cinematográfica que no se queda en la superficie.
Nota: 7/10