El asesino (2023)

“El Asesino” es una película de acción y thriller que, en su ejecución, presenta tanto aspectos sorprendentemente sólidos como algunas inconsistencias que impiden que se eleve a una experiencia cinematográfica verdaderamente memorable. La premisa, la de un asesino a sueldo que se enfrenta a sus propios empleadores después de un error fatal, es un cliché que se ha explorado en la industria, pero la película se esfuerza por darle un giro y una complejidad emocional que, aunque no siempre lo logra, merece una mención.

La dirección de Denis Villeneuve (aunque aquí co-dirigida por David Cronenberg) es, en general, impecable. Villeneuve consigue establecer una atmósfera opresiva y claustrofóbica desde el inicio, utilizando la fotografía de Bradford Young para crear ambientes oscuros y tensos que anticipan la violencia inminente. Hay escenas, especialmente las que involucran la persecución en las calles de Praga, que son visualmente impactantes y se benefician de una dirección de montaje precisa y frenética. Cronenberg aporta su sello distintivo en el maquillaje y los efectos especiales, que son impresionantes en términos técnicos pero a veces estilizados hasta el punto de sentirse artificiales, alejando un tanto del realismo que se busca en la película.

El reparto es sólido, con una actuación particularmente destacada de Mads Mikkelsen como el asesino, Harlan. Mikkelsen interpreta a un hombre marcado por su pasado, un hombre frío y calculador que exhibe una vulnerabilidad latente bajo su exterior de profesional implacable. Su presencia en pantalla es constante, y su interpretación transmite la carga emocional y la desesperación que siente ante la inminente confrontación. El resto del elenco, incluyendo a Michael Shannon como el despiadado jefe de Harlan, cumplen con sus roles, aunque algunas de sus actuaciones resultan algo unidimensionales.

El guion, sin embargo, es donde la película experimenta sus mayores fallos. Si bien la historia presenta momentos de tensión y suspense, la trama avanza de manera poco convencional y, en ocasiones, incoherente. El ritmo es irregular, con largos pasajes dedicados a la contemplación y la conversación que no contribuyen significativamente al desarrollo de la historia. La justificación de las motivaciones del personaje de Mikkelsen es bastante vaga y la resolución final, aunque visualmente impactante, parece forzada y carente de profundidad emocional. Se intenta explorar la naturaleza de la violencia y la falta de remordimiento, pero la película rara vez profundiza lo suficiente en estas cuestiones, optando más por la acción y los efectos visuales. El diálogo, en general, es funcional pero poco inspirado, a menudo recurriendo a frases cliché y situaciones artificiosas.

A pesar de sus defectos, “El Asesino” es una película que ofrece un entretenimiento sólido y visualmente estimulante. Aunque el guion necesita un mayor pulido, la dirección de Villeneuve y la actuación de Mikkelsen compensan en gran medida sus fallas. Es una película que vale la pena ver por su atmósfera, su acción y su impresionante ejecución técnica, aunque no se espera que te deje con reflexiones profundas.

Nota: 6.5/10