Espartaco (1960)

‘Espartaco’ (2009), dirigida por Dick Wolfords, es una épica aunque, en última instancia, decepcionante incursión en el mundo de la Antigua Roma y, en particular, en la sangrienta e inmoralidad de los gladiadores. La película se basa en el relato real de Espartaco, un esclavo que lideró una rebelión de esclavos contra el Imperio Romano, un relato que, como bien sabemos, ha sido objeto de numerosas adaptaciones cinematográficas. Sin embargo, esta versión, a pesar de su ambición y despliegue visual, se queda a medio camino, perdiendo la oportunidad de convertirse en una obra verdaderamente impactante.

La dirección de Wolfords se caracteriza por una puesta en escena grandiosa, con grandes batallas que, sin duda, son el punto fuerte de la película. Las coreografías de las peleas de gladiadores son espectaculares y ofrecen un espectáculo visual convincente. La recreación de Roma, con sus monumentos y mercados, es igualmente impresionante, contribuyendo a sumergir al espectador en la atmósfera del siglo I a. C. Sin embargo, la dirección a veces cae en la exuberancia, llevando a momentos de sobreproducción que restan fuerza a la narrativa. La banda sonora, aunque épica, se siente a menudo estridente y poco sutil, sobresaliendo sobre las diálogos y la construcción dramática.

El reparto es variado y, en general, competente. Kris Kristofferson interpreta a Espartaco con una dignidad serena y una fuerza silenciosa que encajan bien con la personalidad del personaje. Joel Edgerton, como el brutal y despiadado general Crasso, ofrece una actuación memorable, dominando la pantalla con su presencia amenazante y su fría determinación. Olivia Wilde, en su breve aparición, intenta aportar un toque de vulnerabilidad a la chispa rebelde de la esclava Filípides, aunque el papel es meramente ornamental. En general, las actuaciones son sólidas, pero pocos personajes logran profundizar más allá de sus roles estereotipados.

El guion, coescrito por Wolfords y David Straub, es donde la película realmente flaquea. Si bien se intenta explorar temas como la libertad, la opresión y la humanidad en medio de la brutalidad, la ejecución carece de profundidad y complejidad. La trama se desarrolla de forma lineal y predecible, y la caracterización de los personajes es superficial. Se nos cuenta la rebelión como un evento puntual, sin profundizar en las motivaciones de los esclavos o en las consecuencias de su lucha. Se recurre con frecuencia a clichés y a un melodrama barato, desvirtuando las implicaciones políticas y sociales de la historia. La película se pierde en un melodrama excesivo, perdiendo la fuerza de la historia que realmente cuenta.

En definitiva, ‘Espartaco’ es una película visualmente impactante pero narrativa carente de sustancia. Aunque la recreación de la época y las escenas de combate son impresionantes, la historia se reduce a un cliché épico con poco valor añadido. Podría haber sido una exploración cautivadora de la resistencia humana, pero en cambio, resulta ser una experiencia superficial y olvidable.

Nota: 6/10