“Far North” es una película que, a primera vista, podría parecer un simple thriller de supervivencia. Sin embargo, la dirección magistral de Thomas Vinterberg, en su segunda incursión en la cinematografía, desvela una profundidad emocional y psicológica que la eleva a algo mucho más complejo y perturbador. Vinterberg, conocido por su estilo visceral y su capacidad para retratar la vulnerabilidad humana, construye un relato inquietante y claustrofóbico, no solo por el entorno inhóspito de la tundra noruega, sino por la dinámica entre Saiva y Anja, dos personajes que se han refugiado del mundo y han creado su propio universo, marcado por la desconfianza y la lucha por la supervivencia.
El guion, adaptado de una novela de Ole Sarveland, se centra en la gradual desintegración de la paz y la seguridad que Saiva había logrado construir. La llegada de Loki, un hombre perdido y herido, rompe el equilibrio precario de su vida. No se trata de un antagonista convencional, sino de una fuerza disruptiva que despierta instintos primarios y tensiones latentes en Saiva. El guion se beneficia de un ritmo pausado, permitiendo que la tensión se acumule gradualmente, culminando en un clímax visceral y, a la vez, desolador. La película explora temas como la maternidad, la soledad, la naturaleza humana y las consecuencias de nuestras decisiones. El guion no ofrece respuestas fáciles; deja al espectador reflexionando sobre la naturaleza del amor, la traición y la violencia.
Las actuaciones son, sin duda, uno de los puntos fuertes de la película. Karuna Bjørnrud como Saiva ofrece una interpretación magistral, transmitiendo la dureza y el aislamiento de su personaje, así como la complejidad de su relación con Anja. Su mirada, llena de recuerdos y desconfianza, es un retrato conmovedor de una mujer que ha aprendido a protegerse a sí misma de cualquier amenaza. Alicia Vikander, como Anja, aporta una fragilidad y una inocencia que contrastan con la fortaleza de Saiva, creando una dinámica especialmente efectiva. La química entre Bjørnrud y Vikander es palpable y fundamental para el éxito del filme. La interpretación de Barry Keoghan como Loki es sutil y creíble, evitando caer en estereotipos y mostrando la desesperación y el miedo de un hombre perdido en la naturaleza.
Vinterberg utiliza la fotografía de Jonas Larsson para crear una atmósfera opresiva y helada. Los colores grises y ocres del paisaje se mezclan con las luces de la tienda, generando un ambiente de inquietud constante. La banda sonora, compuesta por Max Richter, complementa la visualidad de la película, enfatizando la soledad y el peligro. La dirección de arte es impecable, reflejando la autosuficiencia y el aislamiento de los personajes. La película no se centra en la acción, sino en la psicología de los personajes y en el impacto de sus acciones en su relación. Es una película que invita a la reflexión y que permanece en la memoria del espectador mucho después de haber terminado de verla. “Far North” no es un entretenimiento ligero, sino una experiencia cinematográfica intensa y profundamente conmovedora.
Nota: 8.5/10