Fiesta de empresa (2016)

“Fiesta de Empresa” es una comedia que, a primera vista, podría parecer otra de esas historias de oficina ligeramente exageradas y desprovistas de sustancia. Sin embargo, bajo la superficie de situaciones absurdas y diálogos forzados, se esconde una reflexión sobre la ambición, la lealtad familiar y la fragilidad de los lazos laborales. La película de Ben Falcone y Melissa McCarthy, ambos guionistas y protagonistas, no se conforma con la simple risa fácil; busca el impacto emocional, aunque a veces lo logre de forma desigual.

La dirección de Ben Falcone es sólida, sabiendo equilibrar el tono cómico con momentos de genuina tensión. El ritmo, aunque algo irregular, permite una inmersión gradual en el caos que se desata en la fiesta. La película despliega un ambiente claustrofóbico y desbordante, que se siente palpable gracias a la fotografía y al diseño de producción, creando una atmósfera de potencial explosión constante. Sin embargo, a veces el director se deja llevar por la tentación de la gag visual, que, si bien funcionan en algunos momentos, pueden diluir la coherencia narrativa.

Las actuaciones son, sin duda, el punto fuerte de la película. McCarthy y Falcone, como siempre, están en plena forma, ofreciendo interpretaciones cómicas y naturales que se basan más en la química y el timing que en la grandilocuencia. McCarthy, en particular, domina el papel de una mujer ambiciosa y frustrada, capaz de alternar la frialdad profesional con momentos de vulnerabilidad que conmueven al espectador. Falcone, por su parte, aporta un aire de despiste encantador a Clay, el hermano al que Carol intenta desesperadamente impresionar. La dinámica entre ambos es el corazón de la película y la que le da mayor peso emocional.

El guion, aunque presenta algunos diálogos un poco forzados y situaciones predecibles, ofrece ideas interesantes, especialmente en lo que respecta a la exploración de las motivaciones de los personajes. La idea de que el éxito profesional a menudo se basa en la manipulación y el sacrificio personal es un tema recurrente en el mundo laboral y la película lo aborda con cierta perspicacia. No obstante, el desarrollo de algunos personajes secundarios resulta superficial y poco convincente, perdiendo oportunidades para profundizar en sus historias. El giro final, si bien sorprendente, se siente un tanto abrupto y carente de la profundidad que hubiera merecido.

A pesar de sus defectos, "Fiesta de Empresa" es una comedia inteligente y entretenida, que ofrece una buena dosis de risa y un mensaje sobre la importancia de los valores. La actuación de los protagonistas y la atmósfera de caos inminente hacen de esta película una experiencia visualmente atractiva y mentalmente estimulante. Un escape agradable, perfecto para una noche de cine en casa.

Nota: 7/10