“Finishing the Game: The Search for a New Bruce Lee” no es un documental ordinario; es una incursión vertiginosa en las profundidades de la industria cinematográfica y la obsesión pública con una leyenda. Dirigida con un ingenio corrosivo por Danny Steinmann, la película se presenta como una parodia elaborada, una sátira mordaz que expone la avaricia, la falta de ética y la complejidad de intentar llenar el vacío dejado por el fallecimiento de Bruce Lee en 1973.
La película no se limita a relatar los intentos fallidos de encontrar un sustituto para Lee en ‘Game of Death’. En lugar de eso, la narrativa se desarrolla como una comedia negra inteligente, centrada en la desesperación de los ejecutivos de Hollywood y su búsqueda frenética de un individuo capaz de encarnar el mito de Lee. La ejecución es sorprendentemente ambiciosa, utilizando una mezcla de recreaciones dramatizadas, entrevistas con figuras clave de la industria y fragmentos de material de archivo para construir un retrato caótico y a menudo hilarante. Lo que distingue a la película es su capacidad para presentar una visión de los mecanismos de negocio de los estudios, donde la imagen y la rentabilidad se imponen a la creatividad y al respeto por la figura de Lee.
Las actuaciones son, en su mayoría, sólidas, aunque con un reparto principalmente compuesto por actores menos conocidos. Sin embargo, el trabajo de los que interpretan a los ejecutivos del estudio son particularmente memorables, capturando con precisión la arrogancia y la desesperación de quienes se ven presionados por el público y los intereses económicos. La dirección de Steinmann es pragmática y eficaz, manteniendo un ritmo frenético que refleja el caos de la búsqueda. La película no busca ser un estudio profundo de la figura de Lee, sino más bien una disección de la reacción del mercado a su muerte y la manera en que se transformó su legado.
El guion es la columna vertebral de la película. Steinmann se permite ser audaz y subversivo, utilizando el humor negro para criticar la industria del cine y los aspectos más oscuros de la búsqueda del éxito comercial. La película explora la raza y el prejuicio, sutil pero persistentemente, al mostrar cómo las consideraciones raciales influyeron en las decisiones de quién debía ser el nuevo “Bruce Lee”. No es una obra maestra del cine, pero su visión y análisis de la industria cinematográfica son innegablemente interesantes y provocadores. "Finishing the Game" no busca ser un documental heroico, sino una crítica satírica de un momento crucial en la historia del cine y de la cultura popular.
Nota: 7/10