Flashback (2020)

“Flashback” es una película que, en su apuesta por la nostalgia y el thriller, logra evocar tanto la atmósfera melancólica de los ochenteros como la inquietante sensación de un pasado que no permite ser olvidado. La película, dirigida con un toque particular por Paul Verhoeven, no busca la espectacularidad visual deslumbrante, sino que se enfoca en un estilo más reservado, casi documental, lo que le otorga una autenticidad que, en cierto modo, es su mayor fortaleza. La dirección de Verhoeven se apoya en una fotografía que recuerda a las cintas de bajo presupuesto de ciencia ficción de la época, con colores apagados y una iluminación que prioriza las sombras, creando una sensación de opresión y desesperanza.

La historia, aunque inicialmente parece un simple ejercicio de viajes en el tiempo, rápidamente se revela como un thriller con múltiples capas. El guion, escrito por Ben Flinders y Carl Harry Foster, se aventura por caminos poco transitados dentro del género, introduciendo elementos de drama psicológico y una palpable sensación de horror que se va intensificando progresivamente. El desarrollo de la trama, a pesar de algunos momentos de ritmo lento, es tenso y mantiene al espectador en vilo, forzándolo a cuestionar la realidad y la memoria de Fred. Es importante destacar que la película no se limita a la acción, sino que explora la fragilidad de la memoria y la influencia del pasado en el presente, temas que, aunque no siempre se presentan con la mayor sutileza, se integran de manera orgánica en la narrativa. La historia de la droga Mercury, de origen misterioso y consecuencias devastadoras, funciona como un catalizador para los eventos que desentrañamos junto a Fred.

La interpretación de Mickey Rourke como Fred es, sin duda, uno de los puntos fuertes de la película. Rourke logra transmitir la angustia y la confusión de un hombre que lucha contra sus propios demonios internos y contra una fuerza oscura que parece perseguir su destino. Su rostro, surcado por la experiencia y la desesperación, es un retrato conmovedor de un hombre al borde del abismo. El resto del elenco complementa la actuación de Rourke con notable eficiencia, aunque la mayoría de ellos no tienen el mismo impacto. Sin embargo, la presencia de Timothy Hutton como el hombre de su pasado, resulta crucial para el desarrollo de la trama y aporta un elemento de misterio intrigante.

En definitiva, “Flashback” es una película que, a pesar de algunos defectos técnicos y una duración un tanto extensa, logra crear una atmósfera envolvente y una historia inquietante. No es una obra maestra, pero sí una película que se queda en la memoria por su atmósfera, sus personajes y su reflexión sobre el poder del pasado. La película consigue ser una interesante reflexión sobre la responsabilidad individual y las consecuencias de las decisiones tomadas en el pasado, un elemento que se encuentra, a menudo, ausente en el género de ciencia ficción.

Nota: 7/10