Gnomeo y Julieta (2011)

“Gnomeo y Julieta” es una película que se presenta como una aparente irreverencia, una modernización torpe pero divertida de la tragedia de Romeo y Julieta, y al final, lo consigue, aunque con un éxito limitado. La dirección de Chris Renaud, a través de Animal Logic, es competente pero carece de una verdadera chispa creativa. Se siente como si estuvieran intentando emular el estilo Pixar, pero sin la profundidad emocional o el refinamiento visual que caracteriza a ese estudio. Las secuencias de acción, en particular las carreras de cortadoras de césped, son visualmente llamativas y ruidosas, pero no logran elevar la historia por encima de lo superficial.

El guion, escrito por John Huddleston y Evan Banker, se basa en una premisa atractiva: dos familias de enanos de jardín, los Puglianos y los Capuletos, mantienen una sangrienta rivalidad. La decisión de centrarse en la disputa vecinal es inteligente, eliminando el conflicto familiar tradicional por el odio hereditario, lo que permite una mayor libertad creativa. Sin embargo, el humor, que es el motor principal de la película, a menudo se siente forzado y poco natural. Las bromas, en su mayoría, son derivadas de clichés animados y carecen de la sutileza que harían que el público se sintiera genuinamente entretenido. La trama, aunque llena de situaciones cómicas, carece de un desarrollo profundo y, en última instancia, se siente como una sucesión de gags sin una base sólida.

Las actuaciones de la voz son decentes, con James McAvoy y Emily Blunt ofreciendo interpretaciones convincentes como Gnomeo y Julieta respectivamente. McAvoy aporta su habitual sarcasmo y encanto a Gnomeo, mientras que Blunt logra transmitir la ternura y el desasosiego de Julieta. Hugh Grant, como Shrek, se desvive en un papel que aprovecha al máximo su talento para la comedia, aunque su personaje se siente algo fuera de lugar en el contexto general de la película. El resto del reparto de voces es aceptable, pero ninguno destaca particularmente. Sin embargo, la presencia de Elton John es una adición notable. Las canciones originales, compuestas específicamente para la película, son memorables y, en algunos casos, excepcionalmente buenas, aportando un componente musical agradable y que complementa el tono ligero y divertido de la historia. El uso de melodías clásicas, adaptadas a la trama, es un acierto, evocando la grandiosidad de la obra original.

En definitiva, “Gnomeo y Julieta” es una película familiar entretenida, pero superficial. No es una reinterpretación revolucionaria de la obra de Shakespeare, ni mucho menos una obra maestra del cine animado. Sin embargo, ofrece un entretenimiento ligero y colorido que puede ser apreciado, especialmente por los niños. La película posee una agradable banda sonora y una estética visualmente agradable, pero a menudo carece de la profundidad emocional y la sustancia narrativa necesarias para ser considerada verdaderamente memorable. Se trata más de una distracción divertida que de una experiencia cinematográfica trascendental.

Nota: 6/10