Gummi T (2012)

“Gummi T” es una película que se presenta como un pequeño tesoro de fantasía oscura, una comedia que busca equilibrar la angustia adolescente con el absurdo y, en gran medida, lo logra. Sin embargo, la película no es perfecta, y su éxito reside en gran medida en la particularidad de su tono y en el carisma de su protagonista. La dirección de Christian Sprecher es audaz y decidida, apostando por un estilo visualmente impactante que recuerda a las obras de Tim Burton, aunque con un toque más desenfadado y un colorido que contrasta con la melancolía subyacente de la historia. Se nota un esfuerzo por crear un mundo visualmente rico, con escenarios que evocan un pueblo pequeño y algo olvidado, y con una estética que refleja la personalidad peculiar de su personaje principal. No es una dirección sobresaliente, pero sí una que se mantiene firme en su visión.

La actuación de Anders Presnovitz en el papel de Ivan Olsen es, sin duda, el corazón de la película. Presnovitz logra transmitir la desesperación, la frustración y la vulnerabilidad de un chico marginado de una manera convincente y, a la vez, encantadora. Su interpretación captura perfectamente la mezcla de timidez e ira que caracteriza al personaje, y logra que el espectador se identifique con su lucha por ser aceptado. El resto del reparto, aunque no destacan en papeles principales, cumplen su cometido con naturalidad y aportan a la atmósfera general de la película. Especialmente digna de mención es la interpretación de la abuela, un personaje secundario pero fundamental para el desarrollo emocional del protagonista.

El guion de Claus Hackbart y Christian Sprecher es, a mi parecer, su punto más débil. Si bien la premisa –un chico que se vuelve “el mejor en todo” por un día– es prometedora, la ejecución carece de la profundidad y el matiz que podrían haber elevado la película. La trama avanza a un ritmo rápido, con diálogos a veces torpes y situaciones que, a pesar del humor presente, podrían haberse explorado con mayor detenimiento. La exploración de los motivos detrás de la hostilidad de Ivan y la complejidad de su relación con su padre, por ejemplo, se ven apresuradas y no llegan a desarrollarse plenamente. Sin embargo, la película consigue generar una atmósfera de fantasía creíble, y las situaciones absurdas con las que se enfrenta Ivan son genuinamente divertidas. El guion se beneficia de la inocencia del personaje principal, lo que permite a la película jugar con la fantasía y el humor sin comprometer su mensaje central: la importancia de la aceptación y la auto-estima.

En definitiva, "Gummi T" es una comedia de fantasía peculiar y entretenida que, aunque no llega a la excelencia, ofrece una experiencia visualmente estimulante y un protagonista entrañable. La película tiene un atractivo especial para aquellos que aprecian las historias con un toque de oscuridad, humor y fantasía. Es una película que no se queda en la memoria, pero que deja una impresión duradera gracias a su originalidad y al carisma de su estrella principal.

Nota: 7/10