Happy New Year (1987)

“Happy New Year” (Feliz Año Nuevo) de Paul Feig es, en esencia, un descenso a la comedia de artificio, un intento de subvertir los clichés del género del thriller y el robo, aunque con resultados desiguales. La película, con la particularidad de que todos los personajes deben vestir como personas mayores – una premisa que, en teoría, ofrece un potencial cómico y visual considerable – termina siendo más paródica que sustanciosa. Si bien la intención de subvertir las expectativas es encomiable, la ejecución se queda corta, dejando un sabor agridulce de oportunidades desperdiciadas.

La dirección de Feig es competente en cuanto a la construcción de la tensión inicial y el manejo del suspense, logrando crear un ambiente de intriga que, aunque superficial, se mantiene durante la primera mitad de la película. Sin embargo, la comedia, que pretende ser inteligente y situacional, se basa demasiado a menudo en chistes fáciles y situaciones predecibles. La película no se atreve a ir más allá de las bromas sobre la edad y la apariencia, y carece de la frescura y el ingenio que podrían haber transformado la premisa en algo realmente innovador. El ritmo es irregular, con momentos de fluidez interrumpidos por pausas innecesarias y diálogos que, en ocasiones, se sienten forzados.

El reparto, liderado por John Cho y Aubrey Plaza, ofrece interpretaciones sólidas, aunque las actuaciones estén limitadas por la calidad del guion. John Cho se muestra carismático como Nick, un estafador con un corazón noble, mientras que Aubrey Plaza brilla como la sarcástica y desconfiada Beatrice. Sin embargo, los otros personajes, interpretados por figuras como Helen Mirren y Alan Arkin, se ven reducidos a estereotipos y carecen de profundidad. El guion, escrito por Feig y Michael Schur, presenta un trasfondo romántico que se desarrolla de forma acelerada y poco convincente. La relación entre Nick y Beatrice, aunque con potencial para ser algo más profundo, se siente más como un añadido a la trama que una parte integral de la misma.

La película intenta, sin mucho éxito, equilibrar el thriller con la comedia romántica, pero termina siendo más una comedia física que una aventura emocionante. Los momentos de tensión se diluyen rápidamente en situaciones cómicas, y la trama principal se pierde en un mar de subtramas y personajes secundarios poco desarrollados. El trabajo de producción es notable, con un diseño de vestuario impecable y una atmósfera visualmente atractiva, pero estos elementos no son suficientes para compensar las deficiencias del guion. “Happy New Year” es un ejemplo de una película con grandes ideas que, lamentablemente, no logra ejecutarlas con la solidez necesaria para resultar realmente memorable. Si busca una película ligera y divertida, puede ser entretenida, pero si espera una historia compleja y bien construida, probablemente se quede decepcionado.

Nota: 6/10