Judwaa 2 (2017)

“Judwaa 2” es un ejercicio de nostalgia con un toque de modernidad que, a pesar de sus evidentes referencias al clásico original, no logra alcanzar la cima de la originalidad. La película, dirigida por Krishna Mukherjee, se presenta como una continuación, aunque no como una evolución, de la comedia y acción que definió el filme de 1992. La premisa, centrada en dos gemelos separados al nacer y unidos por un vínculo peculiar a través de sus reflejos, es inherentemente atractiva, pero la ejecución carece de la chispa que haría que la historia brillara con mayor intensidad.

Varun Dhawan, como Prem, ofrece una interpretación competente, mostrando un carisma natural y una habilidad para equilibrar la comedia con momentos de acción. Sin embargo, la química entre él y Taapsee Pannu, interpretando a Raja, es, en ocasiones, mediocra. La relación entre los dos protagonistas no se siente genuina, lo que perjudica el desarrollo de la historia y la inversión emocional del espectador. Pannu, aunque con un buen físico y una presencia en pantalla, no logra transmitir la profundidad necesaria para el papel de Raja, que se ve reducido a una figura secundaria en la trama.

La incorporación de Jacqueline Fernandez, como una espía internacional, aporta un elemento visualmente atractivo y una dosis de glamour, pero su personaje, aunque interesante en concepto, se siente a veces desconectado del resto de la película. Su actuación, aunque eficiente, no aporta una contribución significativa a la narrativa general. Anupam Kher, en un papel inesperado como un ex-criminal, ofrece un alivio cómico ocasional y una presencia imponente, aunque su personaje se siente un poco forzado y unidimensional.

La dirección de Krishna Mukherjee es funcional, manteniendo un ritmo ágil y creando escenas de acción visualmente estimulantes. Sin embargo, la película se apoya demasiado en clichés y en la imitación de momentos icónicos del original, lo que limita su originalidad. El guion, en general, es predecible y carece de profundidad. Las bromas, muchas de ellas, son repetitivas y no logran generar el tipo de humor que se espera de una comedia de acción. Las complejas tramas de espionaje, aunque prometedoras, se desvanecen en un desarrollo apresurado y con soluciones abruptas.

A pesar de algunos momentos brillantes y la presencia de actores talentosos, “Judwaa 2” se queda en la superficie. Es una película entretenida para una tarde de cine, pero que no supera las expectativas generadas por su legado. La banda sonora, sin embargo, es un punto fuerte, con temas pegadizos que acompañan bien el ritmo de la trama. En definitiva, es una adaptación que, si bien intenta honrar su precursor, termina siendo una copia fiel y, en última instancia, decepcionante.

Nota: 6/10