Kick (2014)

“Kick” es una película que, a pesar de su premisa intrigante, termina resultando un ejercicio de indulgencia, una especie de película “de catálogo” que no ofrece nada realmente memorable ni perturbador. La dirección de Michael Biernik se centra en construir una atmósfera de melancolía y tensión sutil, buscando el impacto emocional a través de la incomodidad y el misterio, y en ese sentido, la película tiene cierta intención. Sin embargo, la ejecución le falta la solidez que necesitaba para lograr el efecto deseado. La fotografía, con sus tonos grises y la iluminación sombría, contribuye a esa sensación de inquietud, pero a menudo se siente más como un artificio decorativo que una herramienta narrativa genuina. Biernik parece querer dirigirnos hacia una historia más profunda, pero se refugia demasiado pronto en el thriller psicológico, sacrificando, en última instancia, la exploración de la relación entre Shaina y Himanshu, que, teóricamente, debería ser el núcleo de la trama.

Las actuaciones son, en general, correctas, pero no brillantes. Uma Thurman, como Shaina, ofrece una presencia imponente, dotando a su personaje de una dignidad contenida y una melancolía palpable. Su interpretación es reservada, evocando la complejidad de una mujer que ha visto pasar por su vida experiencias traumáticas y que lucha por encontrar su propio camino. Riz Ahmed, en el papel de Himanshu, aporta una fisura de autenticidad a la figura del policía, mostrando un conflicto interno entre su deber y su necesidad de comprender a la mujer que se cruza en su camino. Sin embargo, ambos actores se ven limitados por el guion, que no les da suficiente espacio para explorar la profundidad de sus personajes. Ahmed, especialmente, se siente algo plano, como un mero vehículo para la trama. La presencia de Pankaj Tripathi, como el excéntrico Devi, es lo más destacable del reparto secundario; Tripathi logra transmitir la locura y la rebeldía de su personaje con una naturalidad y un humor que a veces se pierden en el tono general de la película.

El guion es, sin duda, el principal problema de “Kick”. La idea de Devi, el “Kick” de la historia, es intrigante y ofrece un potencial enorme para la exploración de la obsesión por la adrenalina y el deseo de romper las normas. Sin embargo, la película tropieza al intentar integrar este concepto en la trama principal de manera coherente. Los flashbacks al pasado de Devi se sienten forzados y descontextualizados, y su relación con Shaina se siente superficial y poco desarrollada. La resolución de la trama principal es predecible y poco satisfactoria, resolviéndose con un giro argumental que parece sacado de un libro de clichés. La película intenta, en vano, abordar temas como el trauma, la responsabilidad y la búsqueda de la felicidad, pero termina diluyéndolos en un melodrama convencional. El ritmo es irregular y la tensión que se plantea al principio de la película se desvanece rápidamente, dejando al espectador con una sensación de decepción. En última instancia, "Kick" es una oportunidad perdida, una película que podría haber sido mucho más si hubiera tenido la valentía de apostar por un guion más audaz y una dirección más ambiciosa.

Nota: 5/10