La idea de tenerte (2024)

“La idea de tenerte” es, en su esencia, una película que nos presenta un dilema moral y emocional profundamente inquietante, envuelto en una estética visualmente atractiva y una banda sonora irresistible. La dirección de Charlotte Caulfield es sutil pero efectiva; no se limita a mostrar la relación entre Solène y Hayes, sino que construye un universo narrativo complejo donde cada personaje se mueve con sus propios miedos y deseos. Caulfield consigue crear una atmósfera de vulnerabilidad y ambigüedad, obligando al espectador a cuestionarse sus propias opiniones sobre la moralidad y el amor.

El núcleo de la película reside en la interpretación de Rooney Mara como Solène. Mara ofrece una actuación magistral, transmitiendo la angustia, la frustración y la profunda confusión de una mujer atrapada entre el deseo y el deber. Su Solène es un personaje imperfecto, pero tremendamente humano. Su búsqueda de algo que anhela, a pesar de las consecuencias, es lo que la hace tan memorable. Por otro lado, el papel de Timothée Chalamet como Hayes Campbell es, en cierto modo, más sutil. Si bien su encanto inicial es innegable, la película se centra más en la dinámica de poder y la vulnerabilidad que se oculta tras la fachada de la fama. Chalamet no intenta disfrazar la juventud, la inseguridad y la necesidad de ser amado, lo que aporta una autenticidad palpable a su interpretación.

El guion, adaptado de la novela de Ottessa M. Glendinning, es el punto fuerte indiscutible de la película. La trama no se basa en el melodrama convencional, sino en la exploración de las motivaciones, los secretos y las decisiones que llevan a dos personas, radicalmente diferentes en edad y experiencia, a encontrarse y a crear una conexión. El diálogo es inteligente y honesto, sin caer en clichés. Se insinúa, se revela poco a poco, y se deja espacio para la reflexión. La película se centra en los momentos de incomodidad, en el silencioso entendimiento y en las conversaciones cargadas de significado. La tensión se construye lentamente, creando una sensación de anticipación constante. Aunque la historia puede resultar perturbadora para algunos, la película consigue generar empatía por los personajes, incluso por aquellos que toman decisiones cuestionables.

La banda sonora, compuesta por Sufjan Stevens, es un elemento fundamental para la atmósfera de la película. Los temas son melancólicos y evocadores, acentuando la sensación de pérdida, nostalgia y la inmensidad del deseo. La fotografía, con sus colores apagados y sus composiciones cuidadosamente elaboradas, contribuye a crear un ambiente onírico y a subrayar la belleza sombría de la historia. "La idea de tenerte" no ofrece respuestas fáciles, ni juicios morales simplistas. Se trata, en esencia, de una película que nos invita a contemplar las grietas de la condición humana y a cuestionar lo que realmente valoramos en la vida.

Nota: 7.5/10