La loca aventura del matrimonio (1988)

“La Loca Aventura del Matrimonio” es, en esencia, una comedia romántica que se aferra a la idea simplificada pero irresistible del amor verdadero y la inminente llegada de un bebé como catalizador para el conflicto. El director, Michael Hoffman, construye una atmósfera de optimismo contagioso, especialmente en las primeras escenas, donde la pareja, interpretada con una química palpable por parte de Adam Devine y Katie Sawyer, se ve embriagada por la ilusión de un futuro prometedor. El vestuario, la música y la ambientación general contribuyen a este sentido de felicidad juvenil y vitalidad, un guiño a las comedias románticas clásicas que, sin embargo, no se conforman con simplemente replicar fórmulas probadas.

La película se centra en el descubrimiento de un secreto oculto durante el embarazo de Kristy, un secreto que amenaza con desestabilizar la relación y poner a prueba su compromiso. El guion, aunque no particularmente innovador, se apoya en una premisa intrigante que se desarrolla con un ritmo constante y una dosis de humor que, aunque a veces forzado, cumple su función de mantener al espectador enganchado. La trama se mueve con soltura, evitando los excesos del melodrama y concentrándose en las reacciones de los personajes ante la inesperada revelación. Sin embargo, la complejidad de la situación se reduce a veces a un simple juego de pistas y respuestas, lo que resta profundidad a la narrativa.

Las actuaciones son, en general, sólidas. Adam Devine ofrece una interpretación divertida y accesible de Jack, un hombre con la autoestima bien cuidada pero con una gran necesidad de complacer a su esposa. Katie Sawyer, por su parte, cumple con el papel de Kristy, la mujer embarazada que lucha por mantener la calma y la estabilidad en medio del caos. La dinámica entre ambos es lo que realmente da vida a la historia, y su química es sin duda un punto fuerte de la película. El resto del reparto secundario, incluyendo a los padres de Kristy, aporta toques cómicos y momentos de ternura que complementan la trama principal. La actuación de John Lithgow, en particular, es notable, creando un personaje materno cariñoso pero al mismo tiempo un poco cascarrabias que aporta un contrapunto interesante al universo familiar.

Si bien la película se beneficia de un buen manejo del tiempo y la presentación visual, su mayor debilidad radica en la superficialidad de los personajes y sus conflictos. El secreto que desencadena el drama no se explora con la profundidad que se podría haber buscado, y las soluciones a los problemas planteados parecen surgir de forma demasiado fácil. La película se apoya en el gag cómico del "secreto", repitiéndolo con variaciones, pero sin realmente profundizar en las razones que lo motivaron. En definitiva, "La Loca Aventura del Matrimonio" es una película agradable para pasar el rato, pero que carece de la originalidad y el desarrollo emocional que podrían haberla elevado a un nivel superior. Es un entretenimiento ligero, pero con pocas sorpresas.

Nota: 6/10