La princesa Mononoke (1997)

(JA) · Aventura, Fantasía, Animación · 2h 14m

El destino del mundo depende del coraje de un guerrero.

Póster de La princesa Mononoke
Media
8.3 /10

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Disponible en

Dónde ver La princesa Mononoke

La película La princesa Mononoke está disponible para ver online a través de las plataformas de streaming: Netflix, Netflix Standard With Ads. Consulta a continuación dónde puedes verla directamente.

Sinopsis

Tras sufrir el ataque de un monstruoso jabalí maldito, el joven Ashitaka emprende el camino en busca de la cura que detenga la infección. Mientras, los humanos están acabando con los bosques y los dioses convertidos en temibles bestias hacen todo lo posible por protegerlo encabezados por Mononoke, una princesa guerrera. Ashikata deberá escoger bando y decidir si ayudar a los hombres o las deidades intentando detener la maldición de su herida que se extiende por su cuerpo sin cuartel.

Ficha de la película

Título original

もののけ姫


Estreno



Idioma original

JA


Dirección

Guionista

Toshio Suzuki


Reparto principal de La princesa Mononoke

Actores y actrices destacados que dan vida a la historia en La princesa Mononoke.

Tráiler Oficial

Ver tráiler oficial de La princesa Mononoke

Críticas de la película

Opiniones reales de usuarios que han visto La princesa Mononoke. Consulta sus valoraciones y comentarios.

David Campos
⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐ (9.0/10)

“La princesa Mononoke” de Hayao Miyazaki no es simplemente una película de animación, es una experiencia visceral que permanece en la memoria mucho después de que los créditos finales han terminado de rodar. Esta épica historia, ambientada en un Japón feudal reimaginado, es un desafío narrativo y visual que establece un nuevo estándar para el cine de animación y la narrativa de fantasía. Más allá de la simple aventura, la película aborda temas complejos como la relación entre la humanidad y la naturaleza, el equilibrio ecológico y las consecuencias del progreso desmedido, todo ello envuelto en una estética visualmente deslumbrante.

La dirección de Miyazaki es magistral. La película se siente como un viaje, un recorrido constante por un mundo rico en detalles y texturas. La banda sonora de Joe Hisashi Inokata, con su combinación de música tradicional japonesa y elementos orquestales, amplifica de manera excepcional las emociones y la escala de la historia. La fotografía de Shinya Kajiura crea paisajes impresionantes, desde los exuberantes bosques ancestrales hasta las ciénagas tóxicas, cada uno de ellos comunicando un estado emocional y una atmósfera distinta. La película no se limita a mostrar la belleza natural; también explora su destrucción, y esa dualidad es central para la experiencia del espectador. Se siente la urgencia de la amenaza, pero también la tristeza del daño irreversible.

Las actuaciones, aunque realizadas con títeres de cabezas animadas (un recurso característico de Studio Ghibli), son memorables. Saoirse Ronan, como San, la joven y salvaje guerrera, aporta una vulnerabilidad y una fuerza necesarias a su personaje. Daisuke Sakaguchi como Ashitaka, el protagonista, transmite una mezcla de determinación, dolor y una búsqueda incesante de la paz. Pero es, sin duda, Mononoke, interpretada por Tomoyo Harashin, quien se erige como la fuerza dominante de la historia, un personaje ambiguo que lucha por la supervivencia de su propio reino y, a su vez, por la preservación del bosque. Su conflicto interno, entre su herencia como deidad y su necesidad de defender a su gente, es el corazón palpitante de la película.

El guion, adaptado de la obra de fantasía de Shiba, es intrincado y deliberadamente complejo. Evita simplismos y presenta dilemas morales sin ofrecer respuestas fáciles. El choque de culturas, la ambivalencia de los personajes y la lucha por el equilibrio entre la civilización y la naturaleza son tratados con un respeto que rara vez se encuentra en el género. La película desafía al espectador a cuestionar su propia relación con el medio ambiente y a considerar las consecuencias de sus acciones. No se trata de una victoria fácil, ni de un camino claro, sino de una reflexión sobre la coexistencia, la responsabilidad y las consecuencias del deseo de dominio. La película funciona como un llamado a la reflexión, un recordatorio de que las acciones tienen un precio y que el equilibrio es esencial para la supervivencia de todas las cosas.

Nota: 9/10

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