La venganza (The Hit) (1984)

“La venganza (The Hit)” es una película que se mueve con una cautela casi obsesiva dentro del género del thriller de mafias, y aunque no redefine el género, sí ofrece una experiencia cinematográfica disfrutable, alimentada por una atmósfera tensa y el correcto trabajo de su director, Marc Celdrán. La película, ambientada en el paisaje rural de la España profunda y un París nocturno y desolado, utiliza la locación para generar un desconcierto inmediato, una sensación de peligro latente incluso en los momentos más apáticos. Celdrán se abstiene de la espectacularidad, optando por la sutileza y la sugerencia, lo que funciona sorprendentemente bien para crear un clima de incertidumbre constante.

La narrativa se centra en Willie Parker, interpretado con una dignidad sombría por David Sánchez. Sánchez consigue transmitir la arrepentimiento y el miedo de un hombre que ha renunciado a su pasado, pero que se encuentra inevitablemente ligado a él. Su personaje es entrañable, no por su heroísmo, sino por su humanidad, por su deseo de redención, por la carga que representa su pasado. La actuación de Sánchez es, sin duda, el punto más fuerte de la película. Sus miradas, sus gestos, sus silencios, comunican un mundo de emociones complejas que van más allá de la simple trama criminal.

El guion, aunque no particularmente original en la premisa básica, mantiene un ritmo pausado y deliberado que permite que la tensión se acumule gradualmente. Los diálogos son funcionales, evitando clichés y manteniendo un nivel de realismo que contribuye a la verosimilitud de la situación. Sin embargo, el guion podría haber partido con mayor audacia en algunos momentos, profundizando en la psicología de los personajes secundarios y explorando las motivaciones de los asesinos a sueldo, que se presentan más como meros ejecutores que como figuras complejas. A veces, la película se pierde en descripciones excesivamente largas del entorno, diluyendo el impacto dramático de la trama principal. Aun así, la construcción de las tramas secundarias con respecto a la policía española añade un interesante nivel de intriga.

La dirección fotográfica, a cargo de Javier Fernández, es esencial para el éxito de la película. La paleta de colores, dominada por tonos grises y ocres, refleja la melancolía y la soledad del personaje principal. Las escenas nocturnas en París son particularmente impactantes, logrando evocar una sensación de desesperación y peligro. La banda sonora, discreta pero efectiva, complementa a la perfección la atmósfera sombría de la película. En resumen, “La venganza (The Hit)” es un thriller de mafias bien ejecutado, que, aunque no sorprende, ofrece una experiencia visualmente atractiva y un buen retrato del drama humano en medio de un mundo de crimen y venganza. Es una película que invita a la reflexión sobre las consecuencias de las decisiones pasadas y la fragilidad de la identidad.

Nota: 7/10