Las obras de Da Vinci (2019)

“Leonardo: The Works” no es, como su título sugiere, un documental biográfico exhaustivo sobre el genio renacentista. Es, en cambio, una experiencia inmersiva que utiliza la tecnología de vanguardia para ofrecer una oportunidad única de acercarse a las obras maestras de Leonardo da Vinci de una manera que, hasta ahora, solo se podía contemplar en museos, con la distancia y la inevitable multitud. La película se centra exclusivamente en las pinturas y dibujos que, de manera oficial, se le atribuyen, presentándolas en resolución Ultra HD, lo cual es un factor fundamental para la valoración de la experiencia. La calidad visual es, sin duda, un punto fuerte, elevando la percepción de cada obra a niveles sorprendentes, permitiendo apreciar detalles que a menudo se pierden en reproducciones más convencionales.

El guion, sin embargo, es deliberadamente ligero y no pretende profundizar en la vida de Da Vinci ni en el contexto histórico de sus creaciones. Es un vehículo para mostrar el arte, y funciona eficazmente para ese propósito. No obstante, esta falta de contexto puede resultar decepcionante para aquellos que buscan una comprensión más profunda del artista. La película asume que el espectador ya posee cierto conocimiento de la vida de Da Vinci, o al menos, que está dispuesto a asumir que su genio es innegable. Se centra en la belleza inherente de las obras, pero no explora el proceso creativo, las influencias o los debates que rodean la autenticidad de algunas de ellas. Es una contemplación del arte, no un análisis del arte.

Las actuaciones, o mejor dicho, la ausencia de actores, es un punto clave. La película no cuenta con intérpretes, sino que se centra en la imagen de las pinturas. Esto puede parecer extraño, pero contribuye a la atmósfera de reverencia y contemplación que busca crear. Permite al espectador conectar directamente con las obras, sin la mediación de una narrativa o de un elenco. Sin embargo, esta simplicidad también puede resultar un poco monótona a largo plazo. La música ambiental es evocadora y ayuda a crear una atmósfera adecuada, pero no aporta nada en términos de desarrollo narrativo.

La dirección, realizada por Exhibitions on Screen, se basa en un enfoque minimalista. Se evita el uso de efectos especiales innecesarios, centrándose en la presentación de las obras. El montaje es fluido y permite al espectador dedicar suficiente tiempo a cada pintura, lo cual es fundamental para apreciar la maestría de Da Vinci. No obstante, la ausencia de cualquier elemento adicional –como, por ejemplo, explicaciones curatoriales o fragmentos de investigaciones – limita la profundidad de la experiencia. Se trata de un espectáculo visual, y como tal, requiere una previa disposición al disfrute de la obra en sí.

En definitiva, “Leonardo: The Works” es una experiencia visualmente impactante que ofrece una oportunidad única para admirar las obras de Leonardo da Vinci en alta definición. No es una película en el sentido tradicional de la palabra, sino más bien una exhibición interactiva. Si buscas una inmersión profunda en la vida y obra del genio renacentista, esta película no es la opción adecuada. Sin embargo, si buscas una manera de sentir la belleza y el poder de sus pinturas, entonces puede ser una experiencia muy gratificante.

Nota: 7/10