L!fe Happens (2011)

“L!fe Happens” es una comedia dramática que, a pesar de su premisa sencilla y potencialmente banal, logra tejer una reflexión sobre las complejidades de la maternidad, las relaciones sentimentales y la búsqueda de la felicidad. Dirigida por Michael Wolfe Phillips, la película se sitúa en la vibrante pero a veces frívola atmósfera de Los Ángeles, utilizando la ciudad como telón de fondo para explorar las vidas interconectadas de tres mujeres que comparten una casa y, por extensión, sus propios desafíos.

El guion, aunque no se destaca por una originalidad deslumbrante, funciona sorprendentemente bien en su ejecución. La historia se centra en la situación de Kim (Krysten Ritter), una mujer que se encuentra inesperadamente embarazada. Su vida da un vuelco cuando conoce a Ethan (Thomas Haden Church), un hombre charlatán que, para su disgusto, se enamora de ella y, lo que es aún más problemático, de su hijo. La trama, en su esencia, no es especialmente innovadora, pero Phillips maneja la tensión y el humor con maestría, evitando caer en clichés y permitiendo que la dinámica entre los personajes evolucione de manera orgánica. El ritmo, inicialmente pausado, se acelera a medida que la situación se complica, culminando en un clímax que, si bien no es explosivo, sí ofrece un desenlace satisfactorio.

Las actuaciones son, sin duda, uno de los puntos fuertes de la película. Krysten Ritter ofrece una interpretación convincente como Kim, mostrando su vulnerabilidad, su miedo y su determinación. Su personaje es complejo, no unidimensional, y Ritter logra transmitirlo con sutileza. Kate Bosworth aporta una presencia magnética a Deena, una mujer que lucha por encontrar su lugar en el mundo, mientras que Rachel Bilson, como Laura, encarna la idealización de la vida perfecta, contrastando notablemente con las experiencias de sus compañeras. Thomas Haden Church, por su parte, logra dar vida a un Ethan ambiguo, un personaje que puede resultar odioso o, al menos, profundamente patético. La química entre los actores es palpable, lo que contribuye a la credibilidad de las interacciones y a la emoción de la historia.

Sin embargo, la película no está exenta de fallos. Algunos diálogos pueden resultar algo forzados, y la trama principal a veces se ve eclipsada por episodios secundarios que, aunque interesantes, no se integran plenamente en la narrativa principal. A pesar de estos pequeños inconvenientes, “L!fe Happens” ofrece una mirada honesta y a veces conmovedora a la vida de tres mujeres que se apoyan mutuamente en la búsqueda de sus propios sueños y, al mismo tiempo, se enfrentan a las complicaciones inevitables de las relaciones y la maternidad. La película no pretende ser una obra maestra, sino un retrato realista y relatable de la vida cotidiana, con sus altibajos, sus sorpresas y sus momentos de ternura. Logra, en definitiva, ser una película agradable y reflexiva, que invita a la contemplación y al debate sobre los valores que guían nuestras vidas.

Nota: 7/10