LOL (2012)

“LOL”, el remake estadounidense de la película francesa “LOL”, se presenta como un fresco intento de trasladar la problemática de la adolescencia moderna a un contexto cultural más familiar para el espectador norteamericano. La película, dirigida por Dasha Kelly, logra capturar con éxito la esencia del original, pero no llega a alcanzar su potencia narrativa. El problema reside, en gran medida, en la ejecución y, sobre todo, en la falta de profundidad que le impide consolidarse como una obra realmente memorable.

Miley Cyrus ofrece una interpretación convincente como Lola, una chica en plena crisis de identidad. Su actuación está marcada por una vulnerabilidad palpable y una creciente desesperación ante el abandono. Sin embargo, el guion, adaptado de la versión francesa de 2004, a veces le ofrece escasos recursos para explorar la complejidad emocional del personaje. Se percibe que Lola es un lienzo en blanco que, si bien se pinta con momentos de rebeldía y frustración, carece de una profundidad que la convertiría en un arquetipo inconfundible. La dirección de Kelly intenta evitar la melodramatización, optando por un tono realista y a veces incluso incómodo en la representación de los conflictos familiares.

El reparto secundario, con figuras como Emma Roberts como la mejor amiga de Lola, se sostiene gracias a interpretaciones sólidas y naturales. La dinámica entre las chicas, marcada por la competencia y la preocupación mutua, es uno de los puntos fuertes de la película. Los padres de Lola, interpretados por el matrimonio formado por Martin Starr y Heather Graham, son retratados con una amabilidad forzada que refleja la incomodidad que sienten al tratar con la tecnología y las preocupaciones de sus hijas. Aunque la situación es cómica, también revela una brecha generacional inquietante.

En cuanto a la trama, “LOL” se centra en las presiones sociales de la adolescencia, la importancia de la amistad y las complejidades de las relaciones familiares. La película utiliza las plataformas digitales – YouTube, Twitter y Facebook – como elementos centrales para describir las dinámicas sociales de la época. Sin embargo, la integración de estas herramientas no se siente orgánica. A veces, la película se ve forzada a utilizar la tecnología como un artificio narrativo, en lugar de integrarla de forma natural en la vida de los personajes. El humor, presente en algunos momentos, a veces resulta forzado y poco original.

A pesar de sus fallos, "LOL" ofrece un entretenimiento ligero y accesible, especialmente para el público adolescente. No es una obra maestra cinematográfica, pero sí una película que explora temas relevantes para la época actual. La película no desafía al espectador, sino que le invita a reflexionar sobre las presiones que experimentan los jóvenes en el mundo digitalizado de hoy en día. No obstante, la falta de originalidad y la superficialidad de algunos diálogos limitan su potencial.

Nota: 6/10