Los 4 fantásticos (2005)

“Los Cuatro Fantásticos” (2015) se presenta como un intento ambicioso, y en ocasiones frustrante, de adaptar una historia clásica del cómic al gran formato. La película, dirigida por Josh Trager, se distingue por su estética moderna y su banda sonora potente, pero carece de la chispa emocional y la profundidad que la franquicia merece. La premisa, centrada en la exploración espacial y los efectos devastadores de la radiación cósmica, es intrigante y ofrece el potencial de un relato sobre la transformación y la responsabilidad. Sin embargo, la ejecución termina siendo desigual.

La dirección de Trager opta por un estilo visualmente impactante, con efectos especiales que, a veces, resultan impresionantes. Se aprecia un esfuerzo por modernizar la apariencia de los personajes y sus poderes, alejándolos un poco de las representaciones más cartunescas de los cómics. No obstante, esta modernización también contribuye a una cierta frialdad y falta de humanidad en el desarrollo de los personajes. El uso de la cámara es dinámico y busca generar tensión en los momentos de acción, aunque, en ocasiones, se convierte en excesivo y distrae de la narrativa.

El elenco ofrece actuaciones que varían en calidad. Miles Teller, como Reed Richards, transmite una vulnerabilidad y una lucha interna que son la base de su personaje. Kate Quinn, como Sue Storm, logra crear una presencia cautivante y una conexión palpable con su compañero. Michael B. Jordan, por otro lado, tiene un papel más secundario como Johnny Storm, y aunque su interpretación es correcta, carece de la intensidad necesaria para realmente resonar con el público. El mayor problema reside, sin embargo, en el tratamiento del personaje de Benicio del Toro como La Cosa. Si bien Del Toro aporta su inconfundible presencia escénica, el personaje se sacrifica en gran medida para ser un simple monstruo, perdiendo la complejidad y el potencial trágico que existían en la historia original.

El guion, firmado por Simon Kinberg, es probablemente la debilidad más importante de la película. Se apoya demasiado en la acción y los efectos especiales, relegando a un segundo plano la exploración de las consecuencias psicológicas y emocionales de la transformación. La película se limita a mostrar los poderes de cada personaje sin profundizar en cómo estos afectan su identidad y sus relaciones. Hay momentos que podrían haber sido mucho más significativos si hubieran sido explorados con más detalle. El ritmo es irregular, con flashbacks que, aunque útiles para contextualizar el viaje espacial, interrumpen el flujo narrativo. En general, la historia se siente apresurada y superficial, tratando de abarcar demasiado en poco tiempo. Las motivaciones de Von Doom son poco claras y su plan, simplista.

A pesar de sus fallos, la película no es un completo desastre. Algunos momentos de tensión y la estética general son dignos de mención. Sin embargo, "Los Cuatro Fantásticos" no cumple con las expectativas generadas por la franquicia y las posibilidades que ofrece su premisa. Se queda en un nivel medio, un esfuerzo visualmente atractivo pero carente de profundidad y significado emocional.

Nota: 6/10