Los Caballeros del Zodíaco (2023)

“Los Caballeros del Zodíaco” es mucho más que una simple película de acción juvenil; es una incursión audaz en un universo de mitología japonesa, que combina elementos de samuráis, budismo y fantasía occidental con una frescura sorprendente. La dirección de Kazuhiro Furuhata es el corazón palpitante de esta producción, logrando equilibrar con maestría la brutalidad de las batallas con la contemplación de las enseñanzas budistas que permean la trama. Furuhata no se limita a mostrar combates espectaculares; explora la psicología de los personajes, su evolución a través de los desafíos y la carga del destino. La coreografía de las batallas es, sencillamente, deslumbrante, y a pesar de la escala y la intensidad, siempre se siente orgánica y con un sentido del movimiento muy particular, que evoca la disciplina y la elegancia de las artes marciales. Es una dirección que se aleja del bombardeo visual habitual, optando por un enfoque más introspectivo y estético.

El elenco principal es excepcional. Kouhei Noguchi como Seiya transmite con convicción la rabia, la frustración y, al final, la determinación de un chico que, a pesar de sus métodos cuestionables, lucha por proteger a su hermana. Seiya no es un héroe idealizado; es un chico problemático, impulsivo y lleno de defectos, lo que hace que su viaje de autodescubrimiento sea mucho más creíble e impactante. La química entre los actores, especialmente en las escenas con Lyu Liu, quien interpreta Alhazar, es palpable y contribuye significativamente a la inmersión en la historia. El resto del elenco secundario, aunque con menos tiempo en pantalla, también ofrece actuaciones sólidas que enriquecen el mundo creado por la película.

El guion, adaptado de un manga, presenta algunas limitaciones inherentes a la adaptación de material narrativo tan complejo. Sin embargo, la película logra condensar la esencia de la obra original, presentando una trama que, aunque con algunos giros abruptos y un ritmo a veces irregular, mantiene el interés del espectador. La construcción del universo, con sus santos, sus hierbas, sus rituales y sus deidades, es intrincada y fascinante, pero a veces sacrifica la profundidad en favor de avanzar la trama. La película se beneficia, en parte, de la banda sonora evocadora, que complementa visualmente la acción y subraya la atmósfera de misticismo.

En definitiva, “Los Caballeros del Zodíaco” es una película de acción y fantasía que destaca por su estética cuidada, sus impresionantes escenas de batalla y sus personajes complejos. Aunque no es perfecta, ofrece una experiencia cinematográfica memorable que merece la pena ser vista, tanto para los fans del manga como para aquellos que buscan una película de acción con un toque de originalidad y profundidad. Es una película que se queda con el espectador, invitándolo a reflexionar sobre el destino, la moral y la búsqueda de la propia identidad. Es una obra que, a pesar de sus defectos, demuestra un potencial enorme y deja entrever el potencial de un universo narrativo rico y atractivo.

Nota: 7.8/10