Los jóvenes amantes (2022)

“Los Jóvenes Amantes” es, en su esencia, una película sobre el tiempo y la persistencia del deseo. No es una explosión de melodrama, sino una reflexión paciente y, a menudo, silenciosa sobre la fragilidad de la memoria y la búsqueda de una identidad que parece desvanecerse con los años. La película se sitúa en un ambiente austero, casi clínico, que refuerza la sensación de vulnerabilidad y la carga emocional de los personajes. La dirección de Peter August finitamente consigue crear una atmósfera opresiva, sin caer en el sentimentalismo gratuito, privilegiando la sugerencia y el minimalismo visual.

La película se centra en Shauma, interpretada con una sutileza impresionante por la veterana Ruth Leuwerik. Leuwerik logra transmitir la melancolía de una mujer que ha vivido intensamente, pero que se siente despojada de su feminidad. Su mirada, llena de tristeza y un brillo de rebeldía, es el corazón de la película. David Kohlert, en el papel del joven que la redescubre, ofrece una actuación natural y contenida. El contraste entre la juventud y la madurez, la energía de su personaje frente a la resignación de Shauma, genera una tensión palpable y una dinámica curiosa. No se trata de un romance convencional; es un encuentro entre dos almas perdidas que encuentran un instante de conexión, de reconocimiento, de redefinición personal.

El guion, aunque lento y deliberadamente pausado, es lo que realmente eleva a la película. Evita los clichés y las soluciones fáciles. La historia no se explica, se siente. Se revelan fragmentos del pasado de Shauma a través de recuerdos y diálogos breves, pero significativos. Estos recuerdos no son narrados directamente, sino que emergen como sombras, como ecos de una vida pasada. La película se centra en el presente, en el momento de la conexión, en la incertidumbre de lo que vendrá después. La ausencia de diálogos torpes o expositivos permite que la audiencia se sumerja en la experiencia de los personajes, en sus pensamientos y en sus emociones. La construcción del personaje de Shauma es particularmente inteligente: su pasado, su historia familiar, sus sueños y frustraciones se revelan gradualmente, dotando a su figura de una complejidad y una humanidad conmovedoras.

Si bien el ritmo pausado puede resultar desafiante para algunos espectadores, es precisamente este ritmo lo que otorga a la película su fuerza. "Los Jóvenes Amantes" no busca sorprender ni emocionar de forma espectacular; busca despertar la reflexión y la empatía. Es una película que permanece en la mente mucho después de que los créditos finales han terminado de rodar, invitando a la introspección sobre el paso del tiempo, la memoria y la necesidad de aferrarse a la propia identidad. Un film intimista y redondo, que destaca por su honestidad y su sensibilidad.

Nota: 8/10