Los Newton Boys (1998)

“Los Newton Boys” es un thriller de crimen que, aunque no redefine el género, logra ofrecer un entretenimiento sólido y un retrato interesante de una era de audacia y desesperación en el este de los Estados Unidos. La película, adaptada de un libro de Charles Burroughs, se centra en la saga de los hermanos Newton – el temido Benny, el enigmático Earl y el impulsivo Bill – y sus incursiones a lo largo y ancho del territorio, desde los desiertos de Texas hasta las zonas fronterizas de Canadá. No se trata de un relato heroico, ni de una glorificación del crimen, sino de una exploración sombría de los factores que impulsaron a estos hombres a llevar una vida al margen de la ley.

La dirección de Phillip Noyce es metódica y, en gran medida, efectiva. Aunque el ritmo puede sentirse ligeramente pausado en algunos momentos, esto permite una atmósfera densa y opresiva que refleja la tensión constante de la vida que llevan los Newton Boys. El uso de planos que capturan el vasto paisaje americano, salpicado de pueblos polvorientos y carreteras solitarias, es particularmente notable. Estos espacios amplios sirven como telón de fondo perfecto para la soledad y el aislamiento de los protagonistas, enfatizando la desolación que perciben tras cada robo y la dificultad de escapar de su destino. Noyce no se aferra a la espectacularidad visual, priorizando en cambio la creación de un ambiente inquietante y auténtico.

La película cuenta con un elenco estelar, encabezado por Shannon Tweed como Benny Newton, un hombre atormentado por un pasado violento y un carisma peligroso. Tweed ofrece una actuación convincente, logrando transmitir la ambivalencia del personaje; es capaz de ser seductor y aterrador a la vez. El resto del reparto – incluyendo a Michael Shannon como Earl y John Hawkes como Bill – también cumple admirablemente, aportando matices y complejidad a los personajes. Particularmente destacable es la interpretación de Hawkes, que transmite con sutileza la fragilidad y la vulnerabilidad de Bill, un hombre constantemente arrastrado por la decisión de sus hermanos. La química entre ellos es palpable, creando una dinámica familiar disfuncional que es el núcleo del drama.

El guion, adaptado de la biografía de Burroughs, presenta algunas inconsistencias y momentos que podrían haberse manejado con mayor sutileza. Sin embargo, la película se centra en la psicología de los personajes más que en los detalles del plan de cada robo, lo que resulta en un relato más centrado y reflexivo. La tensión se construye no a través de persecuciones frenéticas, sino a través de las conversaciones tensas y los silencios cargados de significado entre los hermanos. La película no explora el porqué de su criminalidad con profundidad, sino que se contenta con mostrar las consecuencias emocionales y psicológicas de sus actos. El enfoque en el impacto de la vida al margen de la ley, en las relaciones humanas dañadas y en la inevitabilidad del fracaso, es lo que le da a la película una resonancia más duradera.

A pesar de algunas imperfecciones, “Los Newton Boys” es un thriller criminal bien construido, con un sólido elenco y una dirección que establece una atmósfera impecable. Es una película que invita a la reflexión sobre la naturaleza del deseo, la familia y las elecciones que nos definen.

Nota: 7/10