
Lovesick (1983)
(EN) · Romance, Comedia, Fantasía · 1h 36m

Dónde ver Lovesick
Actualmente no se encuentra disponible para ver en plataformas de streaming en España.
Sinopsis
En esta divertida y conmovedora comedia, el fantasma del famoso psicoanalista Sigmund Freud se materializa para aconsejar a un matrimonio de Nueva York, liderado por el carismático Dudley Moore, que se encuentra atrapado en una situación imposible. El brillante, pero torpe, Dr. está enamorado de su paciente, interpretada por Elizabeth McGovern, y Freud, interpretado por John Huston, interviene para ayudarlo a navegar por los turbulentos mares del amor y la responsabilidad matrimonial. Con toques de humor negro y una visión aguda de las complejidades del alma humana, esta película explora el impacto de la influencia del pasado y los inesperados consejos de un espíritu excéntrico. Alan King ofrece un sorprendente alivio cómico en un papel secundario crucial.
Ficha de la película
Lovesick
EN
Charles Okun
Reparto principal de Lovesick
Actores y actrices destacados que dan vida a la historia en Lovesick.
Críticas de la película
Opiniones reales de usuarios que han visto Lovesick. Consulta sus valoraciones y comentarios.
“Lovesick” no es una película que se olvida rápidamente. A pesar de su título, que podría sugerir un romance ligero y superficial, esta comedia de 1970, dirigida con maestría por Warren Kiehne, se sumerge en las profundidades de la psique humana, ofreciendo una exploración sorprendentemente perspicaz de las complejidades del amor, el matrimonio y el peso del pasado. La película, con una estética que recuerda a las comedias de la época dorada de Hollywood, no teme ser ingeniosa, a menudo con un toque de humor negro que le confiere un atractivo singular.
La dirección de Kiehne es notable por su capacidad para equilibrar el humor con la sensibilidad. La película no se limita a las carcajadas; se permite momentos de reflexión, de tristeza, de honestidad brutal. El uso de la cámara, en ocasiones, es particularmente efectivo, especialmente en las escenas que contrastan la realidad presente con los recuerdos del pasado de los personajes. El trabajo con el color y la iluminación contribuye a la atmósfera, creando un ambiente visualmente atractivo y que ayuda a reforzar el tono emocional de la película.
Las actuaciones son, sin duda, uno de los puntos fuertes de la película. Dudley Moore, en su papel de Dr. Moore, está en plena forma, mostrando un carisma innegable y un talento cómico excepcional. Su interpretación es más que la de un hombre enamorado; es la de un hombre atrapado entre sus deseos y las responsabilidades. Elizabeth McGovern aporta una vulnerabilidad y una fuerza interior que complementan perfectamente a Moore. Sin embargo, la verdadera revelación es John Huston como Sigmund Freud. Huston no se limita a ser un fantasma; da a Freud una complejidad psicológica que le permite ser a la vez excéntrico y profundamente humano. El personaje de Huston no es simplemente un consejero, sino un espejo que refleja los miedos y las inseguridades de Moore. Y Alan King, en su papel secundario, ofrece momentos de alivio cómico que no son baratos ni superficiales, sino que contribuyen a la textura general de la película.
El guion, coescrito por Warren Kiehne y Jack Sharkey, es inteligente y con un ritmo bien medido. Aborda temas como la infidelidad, la culpa, el luto y la dificultad de dejar ir el pasado, pero lo hace de una manera que es accesible y entretenida. La película se basa en la idea audaz de utilizar un fantasma del pasado para ayudar a resolver los problemas del presente, una premisa que permite explorar las consecuencias de las decisiones tomadas en el pasado y cómo esas decisiones continúan afectando nuestras vidas. “Lovesick” no es una obra maestra del séptimo arte, pero sí una película memorable que ofrece una perspectiva refrescante sobre el amor, el matrimonio y la búsqueda de la felicidad.
Nota: 7/10
Peliculas que te pueden interesar


After: En mil pedazos

After: Almas perdidas

Amor a medianoche

50 sombras muy oscuras

Rivales

El blues de Beale Street
