Machine (2017)

“Machine” es una propuesta cinematográfica que, si bien no llega a ser una obra maestra, si se presenta como un experimento interesante en la exploración de la conexión humana en un contexto relativamente peculiar. La película, dirigida por Razi Abbasi, se centra en la intensa competencia del mundo de los corredores de apuestas electrónicas, pero rápidamente se transforma en una historia de amor, ambición y los secretos que nos impulsan. La premisa, aunque algo arriesgada, se sostiene gracias a la sólida dirección de Abbasi, quien logra mantener un ritmo constante y generar una atmósfera de tensión que, a veces, se asemeja a la de una película de espías.

Las actuaciones son, en general, sólidas. Mustafa Burmawala, interpretando a un corredor frustrado por las pérdidas, transmite con convicción el peso de sus errores y su búsqueda de redención. Kiara Advani aporta una elegancia natural a su papel, equilibrando la vulnerabilidad de su personaje con una determinación inquebrantable. Sin embargo, el reparto de apoyo, especialmente Ronit Roy y Supriya Karnik, se siente un poco eclipsado por los protagonistas, aunque ambos ofrecen entregas convincentes en sus roles. Roy, en particular, es notable por su capacidad para interpretar personajes con múltiples capas, añadiendo profundidad a la trama.

El guion es, sin duda, el punto débil de la película. Si bien la idea central es atractiva, la ejecución carece de originalidad y, en algunos momentos, se siente forzada. Los giros argumentales son predecibles y, a pesar de que la película se esfuerza por mantener la intriga, la falta de sutileza y profundidad en la caracterización de los personajes lleva a que la trama a veces resulte artificiosa. La exploración del mundo de las apuestas electrónicas, aunque visualmente interesante en ocasiones, se siente superficial y no ofrece una perspectiva crítica sobre las implicaciones sociales y económicas de este tipo de actividades.

No obstante, la película compensa estas carencias con una cuidada puesta en escena y una banda sonora que contribuye significativamente a la atmósfera. La fotografía es dinámica y estilizada, capturando con éxito la energía de las carreras y la sofisticación del entorno de las apuestas electrónicas. La edición es fluida y contribuye al ritmo de la narrativa. En definitiva, “Machine” es una película que no pretende ser revolucionaria, pero que ofrece un entretenimiento decente, especialmente para aquellos interesados en el tema de las carreras de apuestas y las relaciones humanas.

Nota: 6/10