
Mi enemigo íntimo (1999)
(DE) · Documental · 1h 35m

Dónde ver Mi enemigo íntimo
Actualmente no se encuentra disponible para ver en plataformas de streaming en España.
Sinopsis
En los años 50, Werner Herzog compartía piso con Klaus Kinski, un diabólico ególatra. Kinski padecía repentinos e injustificables arrebatos de ira o locura, durante los cuales podía llegar a destrozar el mobiliario del apartamento. La terrible personalidad de Klaus fascinó a Werner y entre ambos nació una estrecha amistad que se fue al garete durante el rodaje de la película "Aguirre, la cólera de Dios".
Ficha técnica
Mi enemigo íntimo
DE
Sabine Rollberg, Lucki Stipetić
Reparto principal de Mi enemigo íntimo
Actores y actrices destacados que dan vida a la historia en Mi enemigo íntimo.
Críticas de la película
Opiniones reales de usuarios que han visto Mi enemigo íntimo. Consulta sus valoraciones y comentarios.
“Mi enemigo íntimo” (Mein teures Eigenbrötchen, 1971) no es simplemente una película; es un documento visceral, un estudio psicológico implacable de la relación entre dos individuos volublemente contradictorios. Werner Herzog, en su máxima expresión, nos entrega un relato perturbador, a menudo grotesco, que explora la fragilidad de la mente humana y la destructiva fuerza de la ambición y la obsesión. La película, que se basa en la experiencia real de Herzog y Kinski durante el rodaje de “Aguirre”, se presenta como una denuncia silenciosa, pero tremendamente efectiva, del precio que se paga por perseguir la perfección artística, especialmente cuando se trata de una figura tan impredecible como Klaus Kinski.
La dirección de Herzog es magistral, no en el sentido de una grandilocuencia visual, sino en la capacidad de encapsular la atmósfera opresiva de la convivencia forzada. El apartamento, reducido y claustrofóbico, se convierte en el escenario de una lucha silenciosa, una guerra psicológica donde cada gesto, cada mirada, es un arma. Herzog evita la glorificación del conflicto, mostrando la brutalidad de las explosiones de ira de Kinski con un frío desapasionamiento que, paradójicamente, las hace aún más impactantes. Se percibe una cierta fascinación por el caos que impregna la película, una aceptación, quizás, de la inevitabilidad del colapso.
Kinski, en su papel, es una leyenda, un monstruo entrañable. Su interpretación es una entrega total, una demostración de una intensidad emocional que traspasa lo dramático y se adentra en lo perturbador. No se trata de un simple ‘villano’; Kinski es un hombre roto, atormentado por sus propios demonios y capaz de liberar una furia incontrolable. La actuación de Kinski es, en mi opinión, la más desafiante y memorable de su carrera. Herzog le da libertad para explorar los límites de su personaje, permitiéndole ser tan visceral y, a menudo, repulsivo.
El guion, aunque deliberadamente crudo y fragmentado, no cae en la mera exhibición de violencia. La narrativa se construye a través de recuerdos, flashbacks y observaciones breves que sugieren un pasado tormentoso y una relación profundamente enredada. La ausencia de una cronología lineal no es un defecto, sino una estrategia deliberada para transmitir la desorientación y la confusión de Herzog, y, en cierta medida, del espectador. La película no busca ofrecer respuestas fáciles; más bien, se adentra en las zonas grises de la memoria y la subjetividad. Se presta mucha atención al detalle, desde la iluminación sombría hasta la banda sonora inquietante, que contribuyen a crear un ambiente de creciente paranoia.
Aunque la película puede resultar incómoda y, en ocasiones, perturbadora, “Mi enemigo íntimo” es una obra maestra del cine experimental. Es una exploración profunda del poder de la obsesión, la fragilidad de la mente y la complejidad de las relaciones humanas. Una película que, décadas después de su estreno, sigue resonando con una fuerza innegable.
Nota: 8.5/10
Peliculas que te pueden interesar


Final Account

De Caligari a Hitler

Cryptoqueen

Los repudiados: la odisea del St. Louis

Goering, el bueno

Sound of Freedom
