“Ned Kelly, comienza la leyenda” no es simplemente una película sobre un ícono de la cultura australiana; es una visceral representación de la injusticia, la resistencia y la pérdida de la inocencia. George Miller, responsable de la épica “Mad Max”, se aventura en un relato profundamente humano que, aunque alejado de su universo postapocalíptico, comparte su misma intensidad visual y su compromiso con la puesta en escena. La película, a pesar de su duración, nunca se siente extensa, sino que avanza a un ritmo implacable, puliendo cada momento con una maestría que recuerda a sus obras anteriores.
La dirección de Miller es, sin duda, la pieza central de esta película. Abandonando los toques futuristas y la acción descontrolada de “Mad Max”, se sumerge en el brutal realismo de la Australia rural del siglo XIX. Utiliza la fotografía de Peter Deming para crear una atmósfera opresiva, con paisajes desolados y un uso audaz del color que intensifica el drama y la violencia. El movimiento de cámara es dinámico y fluido, capturando tanto los momentos de tensión contenida como los enfrentamientos violentos con una crudeza impresionante. Miller demuestra una habilidad para equilibrar la acción con momentos de reflexión sobre la familia, la moralidad y el precio de la libertad.
Martin Sheen ofrece una interpretación magistral como Ned Kelly. Su presencia encarna la nobleza y la determinación de un hombre luchando contra un sistema corrupto. La película no idealiza a Kelly, sino que explora sus defectos y sus errores, mostrándolo como un ser humano complejo, motivado por la lealtad a su familia y un profundo sentido de justicia. La interacción entre Kelly y su hermano Ben (george leapman) es el núcleo emocional de la película, destacando la importancia del vínculo fraternal en un mundo hostil. La química entre los dos actores es palpable y genera empatía por su lucha.
El guion, adaptado de la novela de Thomas Kelly, es deliberadamente sombrío y sin concesiones. Evita glorificar la figura de Ned Kelly como un héroe romántico, presentando la banda Kelly como una amenaza para la comunidad y la ley. La película no trata el tema de la resistencia en términos heroicos, sino que explora las consecuencias de la rebelión y la devastación que deja a su paso. Las escenas de persecución son especialmente impactantes, repletas de detalles sensoriales que nos sumergen en la experiencia de los personajes. Sin embargo, a pesar de su realismo brutal, el guion no pierde la capacidad de conmover al espectador.
Aunque la película es extensa, su ritmo constante y su poderosa carga emocional la convierten en una experiencia cinematográfica inolvidable. “Ned Kelly, comienza la leyenda” no solo es un drama de acción, sino un retrato conmovedor de una familia luchando por sobrevivir en un mundo desigual. Es una película que te obliga a reflexionar sobre la justicia, la libertad y el costo de la resistencia.
Nota: 8.5/10