Öölapsed (2021)

“Öölapsed” es una película que, lejos de ser un drama convencional, se instala como un silencio cargado de expectativas no cumplidas y la amarga realidad del despertar a la vida adulta. La directora Anike Auer ofrece una mirada introspectiva y a la vez visceral a la vida de tres hermanas estonianas, Liis, Karin y Jane, en un punto de inflexión donde la ilusión de la juventud choca con la cruda verdad de sus propias vidas. La película, filmada con una belleza natural y casi austera en el paisaje estonio, se centra en la tensión latente que recorre su relación, una tensión que se desata en una única noche que marca un antes y un después.

La dirección de Auer se caracteriza por su habilidad para crear una atmósfera de incomodidad y frustración sutil. No recurre a melodramas gratuitos, sino que permite que las emociones fluyan de manera orgánica a través de las miradas, los gestos y los silencios. La paleta de colores, generalmente apagada, se intensifica dramáticamente durante la secuencia clave de la noche, reflejando la explosión emocional que se avecina. El ritmo pausado, aunque podría interpretarse como lentitud, sirve para construir la tensión y permitir que el espectador se conecte profundamente con las protagonistas.

Las actuaciones son excepcionales. Grete Konksi, en el papel de Liis, transmite con una notable vulnerabilidad la incertidumbre y el miedo al futuro. Alice Siil, como Karin, captura con maestría la frustración de una mujer atrapada en un entorno laboral donde la ambición es constantemente subestimada. Piret Krumm, interpretando a Jane, ofrece un retrato honesto de la búsqueda de la propia identidad, luchando contra la influencia de una amiga superficial. Sin embargo, es Jaune Kimmel la que destaca con la profundidad de su personaje, Jane, mostrando una fragilidad conmovedora y una creciente convicción en sí misma. Las interpretaciones son realistas, sin artificios, y logran conectar con el espectador de una manera inmediata.

El guion, escrito por Auer y Kati Rahnu, es deliberadamente minimalista. La historia no está repleta de diálogos grandilocuentes, sino que se revela a través de fragmentos de conversaciones, recuerdos y flashforwards. Este enfoque, aunque puede resultar un poco denso para algunos espectadores, es lo que le da a la película su singularidad y profundidad. Los secretos que emergen durante la noche no son melodramáticos, sino que son el resultado natural de años de silencios y miedos. La película no juzga a las protagonistas, sino que simplemente les muestra el lado oscuro de sus vidas, con todo sus complejidades y contradicciones. Es una reflexión sobre la familia, el amor, la pérdida y la dificultad de perdonar a quienes nos han lastimado.

En definitiva, “Öölapsed” es una película inquietante y hermosa, que permanece en la memoria mucho después de que los créditos finales hayan terminado de rodar. Es un retrato honesto y conmovedor de la vida moderna, con un enfoque particular en las relaciones familiares y las dificultades del crecimiento personal. Nota: 8/10