Proyecto Brainstorm (1983)

(EN) · Ciencia ficción, Suspense · 1h 46m

Imagine una máquina que graba sentimientos, emociones y hasta sus esperanzas y sueños. Y piense que puede transferir estas experiencias de una mente a otra...

Póster de Proyecto Brainstorm
Media
3.4 /10

307 votos

¿Qué nota le das?

¡Gracias por tu voto!

Compartir en redes

Disponible en

Dónde ver Proyecto Brainstorm

La película Proyecto Brainstorm está disponible para ver online a través de la plataforma de streaming: Filmin. Consulta a continuación dónde puedes verla directamente.

Sinopsis

El doctor Brace y la doctora Reynolds están a punto de culminar un proyecto: una máquina grabadora que, unida a unos sofisticados sensores de ondas cerebrales, puede leer y grabar todas las sensaciones físicas y emocionales del individuo. Y como colofón, quieren conseguir que esa suma de sensaciones, grabadas en una cinta de diez centímetros, pueda ser reexperimentada por otra persona diferente.

Ficha de la película

Título original

Brainstorm


Estreno



Idioma original

EN



Guionista

Douglas Trumbull


Reparto principal de Proyecto Brainstorm

Actores y actrices destacados que dan vida a la historia en Proyecto Brainstorm.

Críticas de la película

Opiniones reales de usuarios que han visto Proyecto Brainstorm. Consulta sus valoraciones y comentarios.

Álvaro Velasco
⭐⭐⭐⭐⭐ (5.0/10)

“Proyecto Brainstorm” (1983) es una película que, a décadas de su estreno, continúa siendo un ejercicio de ciencia ficción más bien inquietante que entretenida. No se trata de un espectáculo visual deslumbrante, ni de un thriller repleto de giros argumentales que te mantengan al borde del asiento. Más bien, es una experiencia sensorial perturbadora, que juega con nuestras propias ansiedades sobre la vulnerabilidad, la identidad y la naturaleza de la percepción. La película, dirigida con una sobriedad casi glacial por Halston Taylor, se centra en la obsesión del Dr. Brace (Peter Falk) y la Dra. Reynolds (Jacqueline Bisset) por desentrañar los misterios del cerebro y, lo más importante, por compartir las experiencias de un individuo con otra persona. El concepto, en principio, es fascinante y explora territorios filosóficos interesantes, pero la ejecución, lamentablemente, no logra alcanzar su máximo potencial.

La dirección, como se ha mencionado, es deliberadamente distante. No hay un uso excesivo de música de tensión o efectos especiales para tentar al espectador. El estilo se basa en la atmósfera, en la creación de un ambiente de incomodidad y desasosiego. La fotografía, por su parte, utiliza una paleta de colores apagados y contrastes sutiles, contribuyendo a esta sensación de desolación. Sin embargo, a veces esta frialdad se vuelve un problema, restando vitalidad a las escenas. El ritmo es lento, deliberadamente lento, y a veces, la película se permite demasiado tiempo en el vacío, sin avanzar significativamente la trama. Esto puede frustrar al espectador que busca una experiencia cinematográfica más dinámica.

En cuanto a las actuaciones, Peter Falk ofrece una interpretación magistralmente contenida. Su Dr. Brace es un hombre consumido por su ambición científica, pero también por un profundo y palpable dolor. La Dra. Reynolds, interpretada por Jacqueline Bisset, aporta una nota de racionalidad y pragmatismo, pero también de vulnerabilidad ante el experimento. La química entre ambos actores es interesante y añade una capa de complejidad a la relación que desarrollan a lo largo de la película. No obstante, las actuaciones de los personajes secundarios son bastante débiles, lo que a menudo resta credibilidad a las situaciones que se plantean.

El guion, escrito por Walter Newman, es el punto más débil de la película. Si bien el concepto original es intrigante, la historia se siente a veces inverosímil y carece de profundidad. Los diálogos son, en general, poco naturales y las explicaciones científicas, aunque intentan ser convincentes, suenan forzadas. El final, particularmente, es abrupto y deja muchas preguntas sin respuesta, lo que puede resultar decepcionante para el espectador. La película explora temas importantes como la ética en la ciencia y la naturaleza de la conciencia, pero no lo hace con la sutileza y el rigor que merecen. Se siente más como una propuesta interesante que una investigación completa.

A pesar de sus deficiencias, “Proyecto Brainstorm” es una película que provoca la reflexión. Su inquietante atmósfera y sus personajes complejos, aunque no estén perfectamente desarrollados, ofrecen un punto de partida para una discusión sobre la posibilidad de compartir nuestras experiencias y las implicaciones éticas de la ciencia. Sin embargo, la ejecución, en general, es imperfecta y a menudo se siente plana y carente de vitalidad.

Nota: 5/10

Peliculas que te pueden interesar

Los nombres, logotipos y marcas de productoras, distribuidoras y plataformas de streaming mencionadas en esta web pertenecen a sus respectivos dueños. No reclamamos ningún derecho sobre estos elementos. Su mención tiene el único propósito de ofrecer información y facilitar a los usuarios la identificación y disponibilidad de los contenidos. Para más detalles sobre derechos de autor y uso de imágenes, consulta nuestra política de derechos de autor.