Rebelde entre el centeno (2017)

“Rebelde entre el centeno” no es simplemente la historia de J.D. Salinger, aunque la biografía de este enigmático autor sea la base de la narrativa. Es una disección, casi quirúrgica, de la figura de un hombre que se convirtió en un icono literario, pero que, en su vida personal, permaneció un ser tremendamente distante, frustrado y profundamente doloroso. Matt Damon, en un papel que podría haberle resultado demasiado frágil, demuestra una admirable vulnerabilidad, pero también una considerable fuerza para interpretar la agitación contenida de Salinger. No es un hombre fácilmente comprensible, y Damon lo transmite con una sutileza que permite al espectador conectar con su melancolía y su desesperación.

La película, dirigida por Noah Baumbach, se atreve a explorar la compleja relación entre Salinger y su madre, una mujer consumida por el miedo y la paranoia, que le influyó profundamente en su visión del mundo. Patricia Clarkson ofrece una interpretación magistral, llevando al personaje a un extremo de desesperación y control que es a la vez repulsivo y conmovedor. Esta dinámica familiar es el motor principal de la película y establece un contexto crucial para entender la reclusión de Salinger, que se refugió en una cabaña en el bosque, aislado del mundo y sus exigencias.

La dirección de Baumbach se caracteriza por un estilo naturalista que evita los grandilocuentes momentos dramáticos. La película se centra en los pequeños detalles, en las conversaciones cotidianas, en las miradas reveladoras. Esta aproximación, a veces lenta, permite al espectador sumergirse en el mundo interior de Salinger, en su proceso de escritura, en su lucha contra la auto-exploración y en su incapacidad para establecer relaciones significativas. Aunque algunos espectadores podrían encontrar este ritmo pausado frustrante, es precisamente este enfoque lo que hace que la película sea tan efectiva en la representación de la complejidad del personaje.

El guion, adaptado de la biografía de David Shields, no es una recreación literal de la vida de Salinger. Se permite licencias creativas, especialmente en lo que respecta a los detalles más personales, buscando una representación más poética y evocadora de la experiencia del escritor. Se explora la génesis de “El guardián entre el centeno” y el proceso creativo, mostrando la mezcla de realismo y fantasía que caracteriza la obra del autor. Sin embargo, la película no se queda en la mera descripción del proceso; intenta entender la motivación detrás de la creación de un personaje tan controvertido y aparentemente complejo, como Holden Caulfield.

A pesar de sus aspectos positivos, “Rebelde entre el centeno” no es una obra perfecta. A veces la película se pierde en detalles excesivamente personales, y el ritmo pausado puede resultar abrumador. No obstante, la interpretación de las actuaciones, el estilo naturalista de la dirección y la atmósfera melancólica que envuelve la película la convierten en una experiencia cinematográfica memorable. Es una película que obliga al espectador a reflexionar sobre la naturaleza de la fama, la soledad, el trauma y la búsqueda de la identidad.

Nota: 7/10