Sahara (2005)

“Sahara” no es precisamente un hallazgo cinematográfico, pero tampoco es un fracaso absoluto. Dirigida por Rick Jarmel, la película se presenta como un thriller de acción con elementos de aventura y una pizca de intriga, y cumple con cierta medida de ambos aspectos, aunque con un ritmo y una ejecución que podrían haberse pulido para alcanzar un mayor impacto. La trama, centrada en el detective Dirk Pitt (Matthew McConaughey) y su compañero, el joven especialista Steve Zahn, en su búsqueda de un legendario carguero hundido, se abre a una conspiración global que involucra un virus letal y un oscuro secreto relacionado con la Segunda Guerra Mundial. La premisa, basada en el romance del escritor Clive Cussler, ofrece un terreno fértil para la acción y la exploración, pero la película a menudo sacrifica la profundidad en favor de la espectacularidad visual.

Matthew McConaughey, en su característico papel de hombre de acción, aporta la energía necesaria para mantener la película en movimiento. Sin embargo, su interpretación, aunque competente, carece de matices y a veces se siente un poco forzada. Steve Zahn, por otro lado, ofrece un alivio cómico discreto y contribuye a la dinámica del equipo. La química entre ambos actores es funcional, aunque no se establece como un vínculo particularmente convincente. La Doctora Eva Rojas, interpretada por Penélope Cruz, es la pieza central de la conspiración y, en ocasiones, aporta una nota de inteligencia y sofisticación a la narrativa. Cruz, como siempre, entrega una actuación sólida, aunque su personaje se limita a ser una víctima en potencia y a ofrecer diálogos que a veces son un poco redundantes.

La dirección de Jarmel es competente, aunque carente de originalidad. La película se beneficia de unas imágenes impresionantes que muestran la belleza salvaje y a veces desoladora del paisaje africano. Las secuencias de acción, especialmente las relacionadas con el transporte marítimo y las persecuciones, son bastante espectaculares y bien coreografiadas. Sin embargo, la película se ve afectada por un guion que, en su afán por abarcar demasiados elementos, resulta a veces confuso y poco desarrollado. La trama se complica con demasiados giros inesperados y subtrramas que no llegan a resolverse satisfactoriamente. La exploración del tema del colonialismo y la explotación de África, aunque presente, se siente superficial y no se profundiza lo suficiente. La película toca temas interesantes, pero los presenta con una sensibilidad que podría ser más cuidadosa.

A pesar de sus deficiencias, “Sahara” ofrece un entretenimiento decente para aquellos que buscan una aventura de acción con un toque de exotismo. No es una obra maestra, pero tampoco es un desperdicio de tiempo. La película cuenta con momentos de tensión y emoción, así como unas imágenes visualmente atractivas. En definitiva, es un thriller de acción convencional que, aunque carente de originalidad, ofrece unas horas de entretenimiento sin pretensiones.

Nota: 6/10