“Screwed”, la comedia de David Gordon Green, es una joya inesperada, una mezcla audaz de humor negro y sátira social que, si bien no llega a la categoría de oro absoluto del cine, consigue plantar una huella imborrable gracias a su premisa ingeniosa y su ejecución sorprendentemente efectiva. La película, que explora las paradojas de la clase alta y los límites de la identidad, desafía las expectativas del espectador desde el primer minuto, y a partir de ahí, no se detiene en su particular viaje de subversión.
La dirección de Gordon Green es un elemento fundamental del éxito de la película. Evita caer en clichés y opta por un estilo visual ágil y cercano, con planos que a menudo revelan las contradicciones de los personajes y la atmósfera opulenta de su entorno. El uso de la cámara a menudo se siente como una observación sutil, como si la película no se interpusiera en la vida de los personajes, sino que simplemente los registrara, exponiendo sus acciones y reacciones de forma natural. Esto contribuye a un humor que no se basa en la burla directa, sino en la revelación de lo absurdo inherente a las situaciones.
Las actuaciones son, en su gran mayoría, excepcionales. Luke Wilson como el chofer, Danny, ofrece una interpretación que equilibra perfectamente la desesperación y el sarcasmo. Wilson transmite de manera convincente la confusión y la frustración de un hombre que, a pesar de su aparente ineptitud, se encuentra atrapado en una red de circunstancias inesperadas. La química entre Wilson y la imponente, aunque incomprensible, jefa, interpretada por Virginia Madsen, es palpable y genera momentos cómicos de gran factura. Madsen ofrece una actuación que, a pesar de la extraña complejidad de su personaje, logra ser memorable y, en cierto modo, conmovedora.
El guion, escrito por Gordon Green y Aaron Fox, es el verdadero motor de la película. La premisa, aparentemente sencilla, permite una exploración profunda de temas como la ambición, la identidad, la clase social y la construcción del propio destino. La película no se limita a presentar la historia de Danny, sino que utiliza su situación como punto de partida para cuestionar las normas sociales y la forma en que se percibe la realidad. El desarrollo de la trama es inteligente, con giros inesperados y situaciones absurdas que desafían las expectativas del espectador. La película sabe ser inteligente y reflexiva sin perder su sentido del humor. La escritura evita la condescendencia, presentando a los personajes con sus defectos y ambiciones, permitiendo al espectador formarse su propia opinión sobre ellos.
Si bien la película no está exenta de algunos momentos un poco exagerados y la resolución del conflicto podría haber sido más elaborada, la experiencia general es enormemente satisfactoria. “Screwed” es una comedia inteligente, original y sorprendentemente profunda que desafía las convenciones del género y ofrece una perspectiva refrescante sobre la condición humana. Es una película que merece la pena ver y, sobre todo, que se queda en la memoria por mucho tiempo después de que los créditos finales hayan terminado de rodar.
Nota: 7.5/10