Shaft (2019)

La película ‘Shaft’ (1971) no es solo una joya del cine negro, sino un hito que redefinió el género y, crucialmente, introdujo al público en una representación realista y compleja de la comunidad negra americana en los años 70. Más allá de la acción explosiva que asociamos con el título, la película ofrece una crítica social sutil pero impactante, una exploración de la corrupción policial y la violencia sistémica, todo ello envuelto en un thriller de espías que, sorprendentemente, funciona excepcionalmente bien.

El guion, escrito por Norman Lear y Beau Ford, se distingue por su inteligencia y su capacidad para construir una trama que, a pesar de su ritmo relativamente pausado, mantiene al espectador enganchado. La película no se limita a contar una historia de detectives; se adentra en la psicología de los personajes, especialmente en la del detective John Shaft (interpretado magistralmente por Richard Roundtree), un hombre con un pasado turbulento y una moral ambigua. Roundtree, con su porte elegante y su mirada penetrante, personifica la esencia del detective: un individuo duro, pragmático y con un sentido particular de la justicia. Su personaje no es un héroe tradicional; es un hombre que toma decisiones difíciles en situaciones complicadas, y la película no rehúye de mostrar las consecuencias de esas decisiones. El contraste entre su estilo de vida y la figura paterna que intenta reconectar con su hijo, JJ, es un elemento central que añade una capa de drama y humanidad a la trama.

La dirección de Blake Edwards es, en su conjunto, sólida y efectiva. Edwards sabe cómo crear atmósferas de tensión y suspense, y utiliza con maestría la iluminación y la composición de los planos para resaltar los momentos clave de la historia. Sin embargo, lo que realmente eleva la película es el tratamiento del ambiente de Harlem. La película no se limita a mostrar la pobreza y la violencia de la zona; la representa de manera honesta y sin sentimentalismos. Los escenarios son auténticos y vibrantes, y se pueden sentir las tensiones de la comunidad. La película retrata un Harlem no idealizado, sino uno lleno de personajes complejos y problemáticas que reflejan la realidad de la época.

Las actuaciones son impecables. Además de Richard Roundtree, Bill Cosby ofrece una interpretación destacada como el joven y desorientado JJ, mientras que Clarence Williams III aporta credibilidad a su papel como el policía corrupto, mostrando una evolución muy interesante a lo largo de la película. La química entre Roundtree y Williams III es fundamental para el éxito de la historia. La película no se limita a darles roles secundarios; les concede una profundidad y un desarrollo que trascienden la mera función de personajes de apoyo.

En definitiva, 'Shaft' es una película atemporal, un clásico del cine negro que sigue siendo relevante hoy en día. No solo por la acción y el suspense, sino por su retrato honesto y complejo de la sociedad americana de los años 70. Es una película que te hace pensar y que te deja con una sensación de inquietud. Es una obra que merece ser vista y reivindicada.

Nota: 8.5/10