Shorta. El Peso de la Ley (2020)

“Shorta. El Peso de la Ley” es un thriller policial sueco que, a pesar de su premisa aparentemente sencilla, se erige como una exploración inquietante y a menudo incómoda de la tensión social, la corrupción y la fragilidad de la autoridad. La película, dirigida por Lasse Hallström, no se centra en el misterio central de la muerte del joven, sino en las consecuencias de un incidente aislado en el ghetto de Svalegården, mostrando cómo la muerte de un chico desencadena una cascada de eventos que se filtran y distorsionan, transformando un hecho puntual en un conflicto prolongado y complejo.

La película se estructura magistralmente en dos líneas narrativas que convergen gradualmente. Por un lado, tenemos a los dos agentes de policía, Jens y Mike, interpretados con una autenticidad y una sutil evolución por parte de Alexander Rydberg y Josef Kröger. Su relación, inicialmente profesional y algo distante, se ve gradualmente afectada por la atmósfera opresiva del ghetto y la presión de sus superiores. La película evita caer en estereotipos simplistas de “cazadores de criminales”, presentando a Jens y Mike como hombres lidiando con la moralidad ambigua de su trabajo, con la conciencia atormentada por la posible involucración en lo ocurrido. Sus actuaciones son particularmente sólidas, transmitiendo la frustración y la duda con una economía de medios que es profundamente efectiva. Es palpable su conflicto interno, su lucha por mantener la línea entre la ley y la justicia.

La dirección de Lasse Hallström es precisa y minimalista. Se concentra en crear una atmósfera de tensión constante, utilizando la paleta de colores grises y apagados para reflejar la desesperanza y la falta de oportunidades del entorno. La fotografía, aunque no espectaculares, es funcional para establecer el tono general de la película. Se evita el melodrama y la acción grandilocuente, optando por escenas cortas y contundentes que evocan una sensación de incomodidad y peligro. El guion, escrito por Hampus Martin y Lasse Launer, es el punto fuerte de la película. No intenta explicar la causa de la muerte del joven, sino que se centra en las reacciones de los personajes y el impacto del incidente en la comunidad. Las conversaciones, a menudo largas y pausadas, revelan la complejidad de las relaciones y las barreras sociales que dificultan la comunicación. El guion plantea preguntas difíciles sobre el sistema de justicia, la responsabilidad y la importancia de la empatía.

Sin embargo, la película no está exenta de fallos. El ritmo, en algunos momentos, se vuelve un poco lento y la resolución final, aunque lógica, podría haber sido más ambigua. A pesar de esto, “Shorta. El Peso de la Ley” es una obra cinematográfica que invita a la reflexión. No es un thriller convencional, sino un retrato sombrío de la realidad social sueca, donde las leyes a menudo son interpretadas de manera desigual y la verdad se convierte en un recurso escaso. La película no busca dar respuestas fáciles, sino que se pregunta si es posible realmente entender lo que sucede en los márgenes de la sociedad.

Nota: 7/10